Naciones Unidas, 27 feb (EFE).- La ONU aseguró hoy que los piratas que operan en el Golfo de Guinea utilizan medios cada vez más violentos y alertó de que su amenaza ha ganado terreno hasta el punto de poner en peligro la habilidad de los países de la región de explotar y comercializar en paz sus recursos naturales.
"Aunque los Gobiernos de la zona hayan diseñado iniciativas antipiratería, la amenaza no sólo persiste sino que parece haber ganado terreno en una región en la que abundan los valiosos bienes que los piratas persiguen", dijo ante el Consejo de Seguridad el subsecretario general de la ONU para Asuntos Políticos, Lynn Pascoe.
Pascoe presentó ante los quince miembros del máximo órgano de decisión de la ONU el último informe del secretario general, Ban Ki-moon, sobre los efectos de la piratería en el África Occidental y advirtió de que el organismo ha detectado un incremento en la violencia que utilizan los piratas en la región.
"La piratería en el Golfo de Guinea se ha vuelto más sistemática y los piratas apuestan por operaciones sofisticadas y utilizan armamento pesado", dijo el subsecretario general, quien destacó que las bandas criminales tienen en sus objetivos buques "con cargamento lucrativo", en referencia al transporte de crudo entre otras materias primas.
En ese sentido, subrayó que los piratas "limitan los esfuerzos de los Gobiernos regionales por comercializar en paz y explotar sus vastos recursos naturales, e impulsar así el desarrollo socioeconómico de sus países".
Como ejemplo de ello, señaló el caso de Nigeria, país que pierde aproximadamente el 7 por ciento de sus reservas petroleras "a manos de actividades criminales como la piratería".
Con Pascoe coincidió el director de asuntos políticos de la Comunidad Económica de Estados del África Occidental (CEDEAO), Abdel-Fatau Musah, quien destacó que el Golfo de Guinea es "una reserva de preciados hidrocarburos" y mostró su preocupación por el previsible impacto que la piratería tendrá en los planes de la región de doblar su producción petrolera.
Según detalló, los países de la región quieren pasar de los 4 millones de barriles por día actuales hasta los 8 millones en la próxima década.
"No se pueden subestimar las consecuencias que tendrá una piratería descontrolada en las economías de los países de la región ni en la economía mundial", dijo Musah, quien lamentó "la rápida expansión" de la piratería en las naciones del Golfo de Guinea y quien aseguró que ésta alienta "la corrupción, la radicalización de los jóvenes y la inestabilidad política" en la región.
Según los datos que presentó Pascoe ante el Consejo de Seguridad, el fenómeno de la piratería en el Golfo de Guinea cuenta con "proporciones muy preocupantes": en 2011 se registraron 64 incidentes, frente a los 45 del año precedente, y en lo que va de 2012 ya se han contabilizado diez en las costas de Benin, Congo, Costa de Marfil, Ghana y Nigeria.



Pascoe animó a los países de la región a diseñar una estrategia común contra la piratería, lo que definió como "un frente común para responder con éxito a la amenaza creciente de la piratería en sus costas", e invitó a esas naciones a celebrar una cumbre regional en ese sentido "lo antes posible".
El Consejo de Seguridad estudia en estos momentos la adopción de una nueva resolución contra la piratería en el África Occidental, que llamaría a la colaboración de la comunidad internacional con los países del Golfo de Guinea en la lucha contra ese flagelo, así como a la creación de un código de conducta común contra ese fenómeno, y que podría aprobarse próximamente.