La inseguridad en las carreteras mexicanas es un problema que se ha agravado en los últimos años, afectando a todos los usuarios de las vías, pero especialmente al autotransporte de carga.

De acuerdo con la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), el incremento de la inseguridad carretera ha elevado entre 15 y 20% los costos de los seguros para el autotransporte de carga. Esto representa un sobrecosto para las empresas, que se traslada a los precios de los productos y servicios, contribuyendo a la inflación.

Además de los costos económicos, la inseguridad carretera también genera un impacto negativo en la productividad y la competitividad del país. Los transportistas se ven obligados a tomar rutas más largas y seguras, lo que aumenta los tiempos de entrega y los costos de operación.

Esta es la zona en México con más robos a camiones

En el caso de Jalisco, el problema de la inseguridad carretera es especialmente grave. La carretera San Juan de Lagos a Jalostotitlán, que se encuentra en construcción, es un punto de elevada inseguridad, donde se han registrado numerosos robos y asaltos.

La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur) ha advertido que la inseguridad carretera se extiende al Bajío, afectando el transporte de carga, así como de personas para el sector turístico.

Ante esta situación, la Concamin y la Concanaco-Servytur han exhortado al Gobierno Federal a redoblar la presencia de la Guardia Nacional en las carreteras de Lagos de Moreno y San Juan de los Lagos, así como en las vías que conectan con el Bajío.

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¿Qué se puede hacer para enfrentar la inseguridad carretera? 4 acciones inmediatas

La inseguridad carretera es un problema complejo que requiere de un enfoque integral. Las autoridades federales, estatales y municipales deben trabajar en conjunto para implementar las siguientes medidas:

  1. Fortalecer la presencia de la Guardia Nacional en las carreteras.
  2. Mejorar la coordinación entre las diferentes instancias de seguridad.
  3. Implementar acciones para prevenir el delito, como la instalación de cámaras de vigilancia y la mejora de la iluminación.
  4. Fortalecer el marco legal para el combate al crimen organizado.