Fue en abril de 2023, cuando Daihatsu, marca de autos filial de Toyota, admitió haber manipulado las pruebas de choque de cuatro modelos para que pareciera que tenían mejores resultados.
A los meses, el escándalo es mucho mayor, ya que una investigación realizada por una comisión independiente encontró problemas que involucran a 64 modelos, incluidos 22 vendidos bajo la marca Toyota.
La investigación encontró que, además de las pruebas de choque lateral amañadas, las unidades de control de bolsas de aire utilizadas por Daihatsu en las pruebas eran diferentes de las utilizadas en los automóviles vendidos al público, incluidos los modelos Town Ace y Pixis Joy de Toyota y Mazda Bongo.
En esta investigación también se encontraron informes falsos de pruebas de choque de reposacabezas y pruebas de velocidad para algunos modelos.
Daihatsu: Manipulación en los autos evaluados
En abril, las empresas admitieron que durante las pruebas de choque lateral de sus cuatro modelos, estos coches tenían una muesca en el panel interior de la puerta delantera. Esto minimizó la posibilidad de que un choque creara bordes afilados en el panel de plástico de la puerta que podrían lesionar a los ocupantes cuando se despliegue la bolsa de aire lateral.
Daihatsu: La postura de la marca
Toyota dijo que no tenía conocimiento de ningún accidente o lesión relacionada con el problema y agregó que las pruebas de choque lateral de los dos modelos podrían no cumplir con la ley. Dijo además que las verificaciones confirmaron que la bolsa de aire cumple con los estándares de seguridad de los pasajeros.
Por su parte, el Ministerio de Transporte de Japón, anunció que llevará a cabo una investigación in situ en la sede de Daihatsu en Osaka.
Los modelos afectados se vendieron en varios mercados, incluidos Japón, Tailandia, Malasia, Indonesia y los países del Golfo de Arabia Saudita.