Autoridades de Puebla buscan a un sujeto, cuya identidad aún se desconoce, quien el pasado 21 de enero baleó en dos ocasiones a un empleado de un puesto callejero de tacos y molotes en la capital.

La madrugada de dicho día, el sujeto llegó en aparente estado de ebriedad al puesto, en donde metió las manos al contenedor de quesillo utilizado para preparar la comida.

Las cámaras de seguridad grabaron como, al reclamarle sus acciones, el hombre de complexión obesa sacó un arma y cortó cartucho, disparando en una ocasión, sin embargo el arma se le trabó.

El agresor volvió a cortar cartucho y terminó hiriendo en un glúteo y en una pierna al empleado, quien terminó hospitalizado, en donde fue atendido y se declaró fuera de peligro.

El sujeto se dio a la fuga y no ha sido detenido, aunque las autoridades señalan que ya se tienen "algunos avances" para su captura.