La cultura laboral de Japón vive una nueva polémica tras darse a conocer el suicidio de Shingo Takashima, un médico de 26 años que trabajó 200 horas extras en un mes.

De acuerdo con declaraciones de la familia de Shingo Takashima, el médico japonés estaba sometido a largas jornadas laborales y no había tomado un descanso en 3 meses.

Previo a su muerte, le dijo a su madre que su trabajo era demasiado duro; nadie le cuidaba y nadie le ayudaría.

Junko Takashima, madre del médico que murió, señaló que el entorno lo puso al límite, esperando que esto sirva de lección para que el ambiente laboral mejore en Japón.

“Mi hijo no llegará a ser un médico amable, ni podrá salvar pacientes y contribuir a la sociedad. Sin embargo, espero sinceramente que mejore el entorno de trabajo de los médicos para que no vuelva a ocurrir lo mismo en el futuro”

Junko Takashima
Doctor

El hospital negó que la muerte del médico japonés haya sido por las horas extra

Shingo Takashima se suicidó en mayo de 2023; pero es hasta este momento que se hace público el caso.

Al respecto, el hospital donde trabajaba el médico negó todas las acusaciones.

El Centro Médico Konan señaló en una rueda de prensa que fue el propio médico japonés el que se llevó al límite.

Según un portavoz, Shingo Takashima habría tomado todas esas horas extra por su cuenta sin ninguna presión de la institución médica.

Además, señalan que le dan la libertad a sus trabajadores de tomar o no las horas extra, por lo que no se puede hacer un registro de cuánto trabajo realiza un médico.

Doctor escribiendo receta médica

Finalmente declararon que no reconocen las 200 horas extras que supuestamente tomó el médico japonés previo a su muerte, negándose a hacer más comentarios.

Aún así, una investigación externa en el Centro Médico Konan encontró que la muerte en efecto había sido por las extensas horas de trabajo que realizó el médico japonés.

El caso del médico japonés deja en evidencia la extenuante cultura laboral de Japón

La muerte del médico japonés, Shingo Takashima, ha dejado en evidencia nuevamente la extenuante cultura laboral de Japón.

Si bien la carga laboral fue bien vista en la sociedad japonesa, sobretodo después de la Segunda Guerra Mundial, actualmente forma parte de un problema de salud pública.

Estudios de instituciones privadas y públicas de Japón han encontrado una correlación entre las largas jornadas de trabajo/estudio, la presión social y los suicidos.

Aunque se han establecido reformas de ley para atacar este problema, los efectos en realidad han sido mínimos.

Desde 2018 el gobierno japonés señala que los horarios base han reducido gradualmente; sin embargo, no se ha podido hacer nada con las horas extra.

Consultorio médico

Como ejemplo se tiene el mismo sector salud, donde los trabajadores pueden acumular hasta 960 horas extra al año, además de su horario base.

Parte del problema se debe a que la sociedad japonesa tienen internalizada la idea del trabajo sin descanso; básicamente la gran mayoría vive para trabajar o estudiar.

No tienen familias, amigos o actividades fuera de su horario laboral; lo cual ha sido aprovechado por las empresas que dejan que sus trabajadores se exploten a sí mismos.

Las pocas empresas que han tratado de tomar cartas en el asunto les ha sido difícil luchar contra la cultura laboral de Japón.

Pues los mismos trabajadores se niegan a salir más temprano, descansar varios días seguidos, no tomar horas extra e incluso tomar vacaciones.

Con información de CNN