Un "oso" es un hombre alto, fornido, con vello en la mayor parte de su varonil cuerpo, barba y muy cachondo; estas características son enunciativas más no limitativas. En general son super antojables para buena parte de la comunidad gay.

Bien, pues nos pusimos a platicar con nuestro amigo @Indiwulf, gracias a él y a las opiniones de otros tuiteros, llegamos a las siguientes conclusiones:

1. Seguridad. No importa que seas bajito y sin vello corporal, lo que importa es tu actitud, reconoce tus cualidades y muéstraselas a ese "oso" que te vuelve loco. Eso sí, que se vea que te amas, que "trabajas" tu ser, no sólo en lo físico, también en lo emocional e intelectual. El "oso" no espera que seas igual que él, pero le gustará encontrar a un chico interesante y que cuide de sí mismo.

2. Conversación. La buena plática es muy importante pero no seas pretencioso frente a un "oso", tienen muy buen olfato y le molesta mucho la "pose". Habla natural, no presumas tus logros, simplemente comparte con él tus experiencias. Los "osos" suelen ser muy divertidos y una buena señal de que los estás conquistando es cuando lanzan una "feroz carcajada".

3. Sinceridad. No finjas, a los "osos" también se les antoja retozar en su cueva con algunas criaturas del bosque que no volverán a ver, así que si no lo quieres para nada más que sexo, pues no le prometas otra cosa.

4. No compres. Los "osos" activos son una especie en peligro de extinción, es por ello que muchos piensan que "con dinero baila el oso", pero están muy equivocados. Si bien son una "especie gay" muy cotizada, no se trata de mercancía. Para un "oso" nada puede ser más molesto que lo intentes impresionar invitándole la cena o una copa. Si vas a dar algo que se vea que lo haces sin interés de recibir nada a cambio, así el "oso" en cuestión lejos de sentirse ofendido (comprado), recibirá con gusto tu halago.

5. Respeto. Supongamos que ya vas de gane y el “oso” cayó en tu "trampa"; entonces te enteras que tiene una reunión familiar y no te ha invitado ¡calma! no presiones. Las dinámicas familiares son distintas para todos, puede que la "manada" de tu "oso" no esté enterada que es una cría gay, eso no tiene nada de malo, debes respetarlos. Lo importante es que esté a tu lado.

6. Rituales. Los "osos" tienen algunos rituales que debes comprender. A veces al "oso" le gusta pastar en el campo sin ti, no seas aprensivo con él. En ocasiones también se reúne con otros "osos", "lobos", "leones", "nutrias" y demás, en celebraciones exclusivas para ellos a la luz de la Luna; aunque algunas ocasiones estarás incluido, en otras no tienes nada que hacer ahí. Si no estás dispuesto a entenderlo, tu “oso” se aburrirá y te arrojará cual salmón al aire recién cazado en el río.

7. Comida. Dicen que al "oso" lo conquistas por el estómago y hay mucho de cierto en eso, su volumen corporal no es una característica gratuita. Sería bueno que averiguaras que es lo que al tuyo le gusta devorar más. Los hay de paladares exquisitos y otros más simples, pero cuando sepas que es lo que lo hace "gruñir" de placer en la mesa, el que seguramente "gruñirá" de placer en la cama serás tú.

8. Look. Por lo general (esto quiere decir que no es absoluto pero sí muy común), a los "osos" les gustan los chicos con un look varonil. Tal vez ellos mismos "joteen" de vez en cuando y todos lo hacemos ¿a poco no?, pero en realidad a los "osos" no les agradan los chicos con apariencia muy afeminada. No tiene nada de malo ser afeminados, pero probablemente deberás buscar el amor de tu vida en otra "especie gay". Ojo, no intentes cambiar por un "oso", eso está prohibido en todo el "reino gay".

9. Gustos. Curiosos son los "osos", suelen tener muchas aficiones y gustos por complacer. Entérate de qué diva pop es fanático, tal vez sea Kylie Minogue, Madonna o Lady Gaga; puede que también ame los videojuegos, asegúrate de practicar antes de enfrentarte a él en un duelo de Just Dance, obvio alguna vez deberás dejarlo ganar. Otros más prefieren la música clásica y los hay "electrosos", siempre es bueno mostrar interés en todo eso, recibirás la misma atención a cambio.

10. Sexo salvaje. Como buena criatura salvaje, al "oso" le gusta el sexo rudo, deberás ser muy ágil y mostrar creatividad durante el sexo. No temas dejarte llevar por la pasión; gracias a su fuerza, el "oso" podrá cargarte y moverte como quiera, pero también espera respuesta ¡dale duro! Ahora bien, los "osos" además son tiernos y tienen su momento "panda", que es cuando te pedirán besitos, caricias, el tradicional "piojito" y muchos abrazos, aprovecha que hay mucho de donde y abrázalo. Por cierto, no olvides los condones, básico.

Ahora que ya lo sabes ve de cacería.

@Indiwulf

Artículo por @CriSzis