México.- “El Inmortal”, “Brody”, “Jorgito”, “George Fields”, díganle como quieran, pero díganlo bien: Jorge Campos Navarrete, es probablemente una de las figuras más emblemáticas del deporte en nuestro país. Un hombre que deslumbró al mundo entero con sus atajadas acrobáticas y que ha dejado huella en la historia, no sólo como futbolista, sino como ícono de la cultura.
Y es qué desde su retiro en 2004 con los camoteros de Puebla, el oriundo de Acapulco, Guerrero, ha sabido mantenerse vigente y en el gusto del público, quien lo percibe como un hombre ocurrente y amable.
Recientemente Jorge Campos fue el protagonista de una campaña con BBVA, los cuales utilizaron la personalidad del ahora comentarista a favor del cambio de nombre que realizó la entidad en este año.
Bajo el hashtag #SiCamposPuede desarrollaron una historia dividida en cinco capítulos donde se podía ver a el “Brody” luchando contra sus demonios para poder pronunciar las siglas que conforman el nombre del banco. BBVA
Ahora como titular en la imagen de BBVA, Jorge Campos sigue demostrándole a México cómo es posible superar los grandes retos que la vida nos pone. Él por ejemplo, un arquero con habilidades, de 1.74 metros de estatura, logró ser considerado el tercer mejor portero del mundo por la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol.
Un ejemplo de perseverancia
Él mismo ha contado que viajó para probarse en las Fuerzas Básicas de Pumas en las cuales logró quedarse y firmó un contrato con los universitarios en contra de la voluntad de su padre.
Jorge viajaba cada quince días desde la Ciudad de México a Acapulco para visitar a su familia, ese desgaste, con sus seres queridos lejos y sin oportunidades con el primer equipo, lo hicieron pensar en abandonar el futbol. Sin embargo, la historia ya le tenía un lugar guardado.
Durante su primera temporada con los Pumas, el Brody comió banca debido a que la titularidad en el arco estaba asegurada para Adolfo Ríos. Para poder destacar pidió una oportunidad al técnico Miguel Mejía Barón en la delantera y la aprovechó destapándose con 14 goles en esa segunda temporada con la UNAM.

Jorge Campos alternó el resto de su carrera entre la portería y la delantera, incluso para el mundial de 1994, en Estados Unidos, la Selección lo registró bajo las dos posiciones, algo que la FIFA vio como una “excentricidad”.
Pumas, Atlante, LA Galaxy, Cruz Azul, Chicago Fire, Tigres y Puebla fueron los equipos con los que Jorge desarrolló su carrera, marcada por las espectaculares atajadas que lograba y sin duda alguna por los uniformes característicos que usó en cada partido.
Jorge en la actualidad
Ahora, consolidado como una leyenda del fútbol mexicano, Campos sigue dando pasos firmes y superando retos que tal vez él ni siquiera imaginaba. Sin ser un gran orador, es actualmente uno de los comentaristas más queridos de la televisión, situación que fue aprovechada por BBVA, en una campaña que además de todo lo que conlleva nos da una gran lección a los mexicanos.
#SiCamposPuede decir Be-Be-Uve-A, tú también puedes, pero si él pudo lograr sus sueños, destacar gracias a la persistencia de su carácter a la confianza en su talento y la misma superación personal, entonces todos los mexicanos también podemos lograrlo.
