Novak Djokovic se coronó campeón de Wimbledon, tercer Grand Slam del año, tras imponerse a Roger Federer en una final histórica por su duración y por la forma en la que se definió.
El tenista serbio necesitó 4 hora y 55 minutos para vencer a ‘Su Majestad’, segundo cabeza de serie, por 7-6(7-5), 1-6, 7-6(7-4), 4-6 y 13-12(7-3), recurriendo por primera vez a un tiebreak (desempate) de 12-12 tras el cambio de reglas en Wimbledon.
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‘Nole’ salvó dos puntos de partido para conseguir su quinto título de Wimbledon y decimosexto de Grand Slam, con lo que se pone a dos de Rafael Nadal (18) y cuatro del récord varonil que pertenece al propio Federer (20).
Por su parte, el tenista suizo, aseguró que “intentará olvidar” esta final, aunque no perdió la oportunidad para felicitar a Djokovic por un partido “de locura”.
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Federer, quien buscaba su noveno título en el césped del All England Club, no le ha ganado a Djokovic en un Grand Slam desde las semifinales del mismo certamen en 2012.
Final épica e histórica en Wimbledon
La final de Wimbledon fue épica e histórica no solo por la presencia de dos de los más grandes tenistas de la historia como lo son Federer y Djokovic, sino también por lo que se vivió dentro de la cancha.
Y es que por primera vez en la historia de Wimbledon se tuvo que recurrir al desempate en el quinto set con 12-12 en la pizarra.
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Además fue la final más larga en la historia del certamen con cuatro horas y 55 minutos, superando a la final de 2008 cuando Federer cayó ante Rafael Nadal en un partido que tuvo una duración de cuatro horas y 48 minutos.