"Un periódico consta siempre del mismo número de palabras, haya noticias o no las haya."<br>
Henry Fielding
Alguien me dijo: “Desde que Pablo Hiriart dejó de publicar sus columnas diarias en El Financiero, como que ya no me interesa la sección de opinión de este periódico”. Curiosamente, me pasa lo mismo.
Y no es que esté de acuerdo con Hiriart. Aunque puedo coincidir con algunas de sus críticas a AMLO —no con todas, desde luego—, pienso que él se equivoca en el tono excesivamente visceral y, quizá, poco objetivo. Pero quizá eran su estridencia y su apasionamiento tan alejado del análisis sereno lo que hacían de sus artículos lo más interesante de El Financiero, lo que le daba personalidad a ese diario; al menos era lo que a mí lo me llevaba a su sección de columnas.
Sin Hiriart, me acerco ahora sin ganas a leer a otros articulistas. No es que realicen un trabajo deficiente —de ninguna manera me atrevería a decir eso— los señores Raymundo Riva Palacio, Enrique Quintana y Macario Schettino o la señora Lourdes Mendoza, pero no es mucho lo que aportan si alguien ya leyó a los comentócratas de otros periódicos...
A partir de tal reflexión, me pregunté qué extrañaría de otros medios si de pronto dejara de aparecer. Esta es mi lista:
√ De La Jornada, su Rayuela: el editorial más breve y que mejor explica lo positivo y lo negativo de la izquierda mexicana.
√ De Reforma, su nota principal: casi siempre marca la agenda del día, inclusive en ocasiones la de las mañaneras de Andrés Manuel López Obrador.
√ De El Heraldo de México, su monero Alarcón, el mejor caricaturista, en mi opinión. Por su humor, desde luego, pero sobre todo porque a diferencia de otros, no es militante ni de la izquierda morenista ni de la rancia derecha.
√ De El Universal, su columna Bajo Reserva. No sé si diga la verdad todas las veces —de hecho creo que su porcentaje de bateo no es el más elevado—, pero siempre es interesante.
√ De Milenio, las colaboraciones de Carlos Marín; no por analíticas ni por informadas, sino porque se él toma tan en serio su papel de ser irónico al criticar a la 4T.
√ De Excélsior, las columnas de Francisco Garfias, el articulista que siempre investiga lo que publica. No vuela, pues.
√ De El País —diario extranjero con amplia circulación en México—, sus entrevistas, aunque tristemente las más destacadas no las genera la redacción local.
√ De Radio Fórmula, el noticiero de Ciro Gómez Leyva, que escucho a diario; sí, lo prefiero a las mañaneras, y de cualquier forma Ciro me da a conocer lo más relevante de las conferencias de prensa de AMLO.
√ De la TV mexicana, lo que Denise Maerker informa en Televisa; el medio de mayor penetración en México sigue siendo, nos guste o no, un referente.
√ De las redes sociales, los comentarios graciosos en Twitter, en ocasiones basados en fake news; pero hablando con franqueza, si a los tuiteros se les exigiera que siempre corroboraran lo que dicen la empresa del pajarito azul perdería su encanto.
√ De los portales de internet (SDP Noticias incluido), la demostración diaria que dan de que se puede —e inclusive se debe— competir con los grandes medios con equipos pequeños, y además sobresalir en el intento.