El 7 de Agosto se inauguró la cuarta edición del festival de cine de comedia: “24 Risas por segundo” (en alusión a los 24 cuadros por segundo que corren por un proyector), con alfombra roja, proyección cinematográfica y coctel inaugural, en el Cine Villa Olímpica; festival que este año rindió un homenaje al “Cine de ficheras” (que también se conoció como “sexycomedias”, durante las décadas de los 70 y 80).
Acudieron los cómicos: Alfredo “Pelón” Solares y “Lalo el Mimo”, además del músico Pepe Arévalo (sin sus mulatos); no pudieron asistir, pero mandaron mensajes de felicitación y agradecimiento: la vedette Wanda Seux y los miembros la Internacional Sonora Santanera.
Este año se registraron 83 comedias (7 largometrajes y 76 cortometrajes), resultando en la selección 20 cortometrajes y 4 largometrajes de Durango, Baja California, Querétaro, Yucatán, Guanajuato, Sonora, Jalisco y CdMx.
También se registraron 150 cortometrajes y 9 largometrajes extranjeros, de España, Uruguay, Alemania, Irlanda, Colombia, Francia, Estados Unidos y Argentina (de este último país, se proyectó la película “Rebobinado”, dirigida por Juan Francisco Otaño, que me hizo reír como idiota (hubo una parte que me perdí los chistes, en una escena de un bar, porque el sonido estaba muy malo. La buena noticia: tenía subtítulos. La mala noticia: estaban en inglés, idioma que no entiendo ni un carajo).
El Festival durará hasta el 12 de agosto, en los cines Tonalá, Cineteca, Autocinema Coyote y varios más. Todas las películas y salas cinematográficas están a su disposición en la página de Internet: www.festival24risas.com
La maestra de ceremonias (durante la entrega de reconocimientos, discursos y albures al por mayor) fue la cabaretera Catrina Hija de Poota, ceremonia donde “Lalo el Mimo” dijo: “¡Dios te bendiga, Guillermo Calderón, por inventar este género!” (rindiendo un merecido homenaje al fallecido productor cinematográfico).
En la clausura del Festival se proyectará la cinta de humor negro “El esqueleto de la Señora Morales” (Rogelio A. González, 1959), en su cincuenta aniversario, en una versión restaurada por la Cineteca Nacional.
Milka Ibáñez, la directora general, me confió: “He organizado y participado en muchos festivales cinematográficos en México, así me di cuenta de la enorme calidad que tiene la comedia que se produce en nuestro país, así que decidí organizar un festival especializado en comedia. No nada más de cine comercial, sino que me interesa mucho promover la producción independiente”.
Le pregunté al actor, productor y director Swald Huerta, por qué apoya un festival de comedia (su empresa Culturalmente Responsable, es patrocinadora del evento), y el simpático hombre con bigote de Salvador Dalí y falda escocesa, respondió: “La comedia es un género dramático complicadísimo, que retrata la realidad fielmente; burda o graciosa, es tu identificación y lucha contra la adversidad. En América Latina y en México, es una manera muy arraigada de enfrentarse a la realidad, un parámetro para entender lo que sucede alrededor, de ahí su gran importancia”.
Por último, conversé con el gran señorón del Cine de Ficheras: “Lalo El Mimo”.
-¿Qué te hace reír?
-Todo me hace reír. Soy mexicano.
-¿Cuál es tu cómico favorito?
- Cualquiera que suba a un escenario con el fin de sacarme una sonrisa, siempre lo logra.
-¿No te da miedo hacer el ridículo?
-No, desde hace 60 años que subí al escenario e hice el ridículo, supe que yo sirvo para esto.
-El público del “Cine de ficheras” fue mayoritariamente de clase trabajadora, como el del burlesque y la carpa. ¿Te sirvió actuar en lugares lúmpenes para caracterizar tus personajes cinematográficos?
-Todos trabajamos en carpa, eso nos hizo tener contacto con el público y conocerlo. Pero además hice teatro de variedades y sobre todo cabaret. Yo despegué en el Terraza.
-¿Nunca te interesó la comedia política?
-¡No! ¡Y menos ahora! ¡No quiero terminar en una carretera guerrera!
-¿Tips para hacer reír?
-Más que tips, hay maneras, así como hay notas para el piano, hay maneras de hacer reír: está el chiste hablado, el actuado, la mímica. Yo no sabía alburear y me especialicé en la mímica. En Inglaterra monté un espectáculo de mímica, con efectos de sonido: “La muerte del guajolote”, que era una parodia de “La muerte del cisne”. Ahí tenía a los ingleses muertos de risa; la comicidad es un lenguaje universal.
-No solo las “sexycomedias” están olvidadas, sino todas las comedias de antes, las que hacían Alfonso Arau, Luis Alcoriza, Alberto Isaac, Julián Pastor.
-Pero se siguen haciendo comedias, y eso es bueno. No todas las comedias de la actualidad son muy graciosas, porque no todos los que las hacen son cómicos de vocación, y muchos jóvenes ahora se ofenden de todo. Lo importante es que no dejen de filmarse, por eso son necesarios los festivales como éste. La cosa es muy sencilla, nomás hay que hacer el ridículo y ya, dejar salir la risa.