30 de abril de 2024 | 01:57 a.m.
Opinión de Manuel García

Y las planillas de Futuro y Morena, ¿a quién representan?

Aceptar sin chistar un incremento del doble en los recursos públicos a su partido, Futuro; son acciones que le cobrarán factura a Kumamoto.
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La desilusión de Futuro con Kumamoto

Debo iniciar esta columna haciendo una confesión: hasta hace tres años yo también pensé que Pedro Kumamoto representaba una alternativa viable, pero esa idea ya quedó totalmente descartada.

En diversos espacios ya se han tocado las incongruencias de este personaje, que estuvo tres años desaparecido de la escena pública y ahora pretende, sin trabajo previo, gobernar a Zapopan, uno de los municipios más importantes del país.

Los casos de acoso y hasta pedofilia en su grupo político; ser el primero criticar a los partidos políticos y luego hacer uno; el exigir que sin voto no hubiera dinero, pero aceptar sin chistar un incremento del doble en los recursos públicos a su partido, son acciones -u omisiones- que, estoy seguro, le cobrarán factura a Kumamoto. Pero antes revisemos otro tema: su planilla.

¿A quién representa la planilla que registró Pedro Kumamoto en Zapopan? Porque alcanzo a ver mucho nombre de escritorio, sin que se les conozca trabajo a pie de calle, sin un arraigo real a un municipio que, si bien no va por mal camino, aún requiere de mucho trabajo.

A esto agréguele que la planilla está incompleta, como que de plano no encuentran perfiles que le quieran apostar a un proyecto que, recién nacido, ya trae tantas broncas. En la foto que circularon a los medios aparecen solo 20 de los 24 integrantes de la planilla. ¿De plano ni para eso tuvieron poder de convocatoria?

Falta de oficio político

Kumamoto se peleó con dos de quienes fueron sus candidatos en Wikipolitica para Zapopan hace tres años, Rodrigo Cornejo y Pepe Martínez, lo que recorta la baraja de posibilidades y evidencia una falta de oficio político. Podremos estar o no de acuerdo con ellos, pero traían un trabajo de calle que no se ve por ningún lado en la planilla de Futuro para Zapopan.

El otrora candidato independiente muestra un equipo en el que figuran itesianos, fresas-alternativos, hipsters, académicos y fugaces funcionarios públicos sin haber cumplido con tareas de responsabilidad.

¿Cómo podrán convencer que tienen la capacidad de gobernar si nadie en su equipo ha enfrentado la responsabilidad de tomar decisiones en el sector público?

Ahora, si la de Futuro es, al menos, criticable, la de Morena no tiene ni pies ni cabeza. Uno no entiende para qué tanto sombrerazo al interior del partido si iban a terminar llenos de cuotas y cuates. Digo, tampoco es que sorprenda, pero al menos se esperaba que fueran menos descarados.

Se nota que, por ejemplo, las selfies y los tuits le sirvieron a Alejandro Puerto, que sin más mérito que su amistad con Attolini está en la planilla de Alberto Uribe. Ni qué decir de Óscar Ábrego, cuyo mayor mérito en este proceso ha sido presionar desde su “Gran Alianza” para que le tocara aunque sea un huesito.

Llama la atención la ausencia de Mariana Fernández en el equipo de Uribe, y más su aparición en la planilla de Carlos Lomelí en Guadalajara.

La menos peor es la planilla que presentó Juan José Frangie, el candidato de la continuidad por Movimiento Ciudadano. Quien fuera jefe de Gabinete de Pablo Lemus integró perfiles que, si bien se alcanza a notar que no se libran de cuotas del todo, sí representan a varios sectores.

Está para resaltarse el caso de Cindy Blanco. Esta mujer, de apenas 30 años, se ha dedicado con éxito a incubar e impulsar proyectos empresariales entre jóvenes. Otro es Claudio de Angelis, que desde la sociedad civil ha hecho una chamba buenísima por el bienestar de niñas y niños.

Entre quienes representan la continuidad del proyecto de Lemus están Sandra Vizcaíno, Iván Chávez o Fabian Aceves.

Al final de cuentas, el elector es el que decidirá a qué proyecto le da sus quereres.