“La crisis del Reformismo Educativo en México”

Ayer, a raíz de la segunda mesa de análisis para presentar mi libro: “La crisis del Reformismo Educativo en México” (Coedición UPN, Episistemas Educativos e Interleader, 2021), la Maestra Catalina Inclán (IISUE-UNAM) me preguntó: “¿desde dónde hablar de ser crítico; desde dónde la observación crítica.” (1).

Nuestra colega Catalina lo preguntó así debido a dos razones: 

1) Porque es importante aclararlo (desde una perspectiva teórica y metodológica), sobre todo cuando estos materiales de lectura están dirigidos a estudiantes, docentes e investigadores interesados en el análisis de las políticas públicas educativas.

2) Porque el subtítulo del libro más reciente es: “ Observaciones críticas del período 2013-2020”.

En respuesta dije, durante una de las rondas de comentarios finales, que en mi anterior libro sobre “Cambio Educativo y Políticas Públicas en México” (UPN Unidad Querétaro, 2018), fijé mi posición al respecto. En ambos volúmenes presento colecciones de apuntes reflexivos e informados, desde la observación crítica, en torno a las políticas educativas aplicadas en México, durante el período 2013-2020.

Tanto ese libro como el más reciente, no son productos de reportes de investigación, aunque sí retoman algunos textos de la investigación educativa para sustentar algunas ideas.

Por ello, el lector sólo encontrará en ellos una colección de artículos de opinión que no tienen ningún objetivo “científico” definido, más allá de ejercer la libre expresión de puntos de vista y la reflexión argumentada; ni hallará una “homogeneidad metodológica” rígida, como tampoco un orden cronológico.

Es otra lógica la que prevalece en estas obras, que por cierto se podrían leer como dos caras de una misma moneda analítica, porque en ambos casos sólo reúno una colección de comentarios diversos y plurales sobre lo que se ha dado en llamar, en México, “Reforma Educativa”; y que están agrupados en un esquema temático sencillo, básico, donde examino los diferentes rostros de las gestiones educativas de los gobiernos de Enrique Peña Nieto y de Andrés Manuel López Obrador, en materia educativa. (2)

Por lo tanto, son volúmenes abiertos a la divulgación, para un público no especializado, y no necesariamente acostumbrado al lenguaje de la investigación científica dentro del campo educativo. Sin embargo, no se dejan de lado, en los textos, el rigor informativo, la actualidad noticiosa, ni la exigencia de ejercer la crítica (a favor y en contra de las decisiones gubernamentales) que demandaba el momento, la coyuntura.

Más que un intento de sustentación teórica, en ambos libros se reúne un racimo de notas y comentarios enmarcados en lo que se conoce en el medio como “periodismo temático para no especialistas”.

Debo aclarar, por todo ello, que la selección de textos no obedece a un protocolo cerrado, a la manera de las “normas técnicas o académicas” dominantes, que son exigidas por lo regular en los círculos del saber y del poder institucionalizado, hegemónico, corporativo. Por el contrario, las reflexiones que ahí aparecen fueron escritas en coyunturas específicas, de acuerdo con las circunstancias particulares que derivaron de la puesta en acción de las “Reformas Educativas” (la del “Pacto por México” de 2013 y la de la “4T” de 2019), y al paso intuitivo, al reto creativo, que genera la dinámica de enviar colaboraciones semanales al sitio informativo SDP Noticias.

En esa idea y con ese razonamiento, los dos libros parecen estar más identificado con la obra del Maestro Olac Fuentes Molinar, que con los ensayos “doctos” o “sofisticados” que edita y publica la mayor parte de las revistas especializadas.

La elección de dicho género, si se le puede llamar de algún modo a la “observación crítica”, lo describe así el Maestro Olac en su libro Educación y Política en México: 

“Tratar de ser periodista, de comunicar llanamente y con calor exigió el rompimiento, así fuera parcial, con el uso academicista según el cual uno escribe para el consumo de sus colegas y la mayor gloria personal y, frecuentemente, ajustándose a la máxima que acuñó Renato Leduc: el prestigio de un autor está en razón directa al cuadrado de su oscuridad.”

Mtro. Olac

Con esa pauta “fuentes molinariana”, las columnas reunidas en ambos libros son independientes en sus contenidos, ya que no se limitan a seguir una “línea editorial recta”, cerrada, acrítica, sino que están unidas o agrupadas, de manera asimétrica, por los momentos en que consultaba la información y ejercía el examen crítico de los hechos (no en un sentido negativo), es decir, de las políticas públicas que, sobre Educación, fueron desarrolladas en México, durante un período determinado.

Así se produjo este grupo de colaboraciones editoriales durante la revisión, la confrontación de ideas y el análisis informado, a partir de datos oficiales y fuentes diversas; todo ello, sin identificar de manera explícita un “objeto de estudio” (tal vez, sí, un campo de conocimiento), puesto que estas obras no constituyen, reitero, un tratado ni un reporte de investigación formal, protocolario, porque no se queda atado a los “marcos rigurosos” de la investigación educativa profesional.

En los textos se encontrarán, sin embargo, con un fenómeno a revisar, a indagar, a reconocer como campo problemático: un conjunto de políticas públicas educativas orientadas hacia el cumplimiento de una de las llamadas “Reformas Estructurales” del gobierno peñista (que posee un toque de reformismo conservador), así como de la Reforma “reactiva” del gobierno de López Obrador (que es, según mi interpretación, la iniciativa reformista de la “4T”).

A través de los artículos de opinión, a los que sugiero leer como piezas independientes y no secuenciadas, en ambos libros el lector podrá descubrir los contextos, los sujetos, las intenciones, los intereses, los contenidos de los discursos, los recursos, los fines, las propuestas y contra propuestas relacionadas con o enraizados en la esencia del “cambio”.

Aparecen, por tanto, las zonas y los contenidos de unas políticas públicas cargados de incoherencia, de contradicción, de incongruencia sobre “lo educativo” en el tiempo referido (2013-2020), así como las inconsistencias, los excesos y los vacíos.

También se consignan o se revelan las voces de los docentes, de los directivos escolares, de los dirigentes de los sindicatos, de los opositores a ambas “Reformas”, y por qué no, hasta de sus “porristas”.

Con todo y la aclaración sobre el sentido de los textos (no como productos de “la ciencia” sino como una propuesta de divulgación y de observación crítica, como reflexión periodística de la realidad), no está por demás precisar la posición, teórica y epistemológica que hay detrás de esta construcción analítica, que es más cercana a la fenomenología interpretativa.

En la confección de ambos libros no hay un apego irreductible a los criterios editoriales cientificistas, ni a una esquematización típica propia de los textos académicos. No. Debido a ello precisamente y al buscar un equilibrio con la congruencia de formato, no incluyo una bibliografía especializada, sino más bien notas o referencias sencillas, al pie de cada artículo o en un bloque final, que inserté cuando éstas se requirieron, (en lenguaje periodístico, podría decir que las coloqué ahí sólo para revelar “la fuente” informativa). Y no, no hay conclusiones en ambos casos, porque cada lector (espero que haya) podrá, con tijera en mano, recortar y sacar las propias.

En resumen, éstos no son textos de literatura científica, sino más bien son libros de análisis y divulgación desde la observación crítica, del periodismo libre, desde la reflexión incisiva, en torno a hechos vinculados con o derivados de las políticas públicas educativas aplicadas por los gobiernos y vividas por el conjunto de la sociedad, en México, durante un período definido de su historia reciente.

Espero que con esta breve nota aclaratoria se despejen las dudas que surjan, eventualmente, sobre la definición reflexiva, más allá de las fronteras teórica y metodológicas, que hay detrás de los textos que he publicado durante los últimos años.

Notas:

(1) La mesa de ayer, 10 de marzo 2021, estuvo integrada por la Mtra. Catalina Inclán (IISUE-UNAM), la Dra. Arcelia Martínez Bordón (UIA) y por el Dr. Manuel Gil Antón (El Colegio de México). El anfitrión de la sesión virtual y moderador fue Erick Juárez Pineda (Educación Futura), a quienes agradezco su valiosa participación en la mesa de ayer y por los comentarios que me enviaron previo a la impresión del libro.

(2) Retomo la nota aclaratoria que apareció publicada en mi libro: "Cambio Educativo y Políticas Públicas en México" (UPN, Unidad Querétaro, 2018).

jcmqro3@yahoo.com