Primero, entendamos la denuncia

En 2019 una banda del crimen organizado quitó la vida a algunas personas —entre las que había menores de edad— de la familia LeBarón. Los hechos ocurrieron en Sonora.

El gobierno investigó y detuvo a más de 10 personas relacionadas con el terrible caso.

El asesinato de 7 menores y dos mujeres se dio en el contexto de la enorme violencia que ha enlutado a México desde los tiempos de Felipe Calderón, quien declaró a tontas y a locas una absurda guerra al narco para intentar que se olvidara el fraude electoral que lo llevó al poder en 2006. Tal situación de inseguridad rebasó al expresidente Peña Nieto, quien entregó a su sucesor, López Obrador, pésimas cuentas en la materia.

No hay fórmulas mágicas para superar un problema tan grave y espantoso. Así que el gobierno de AMLO decidió cambiarlo todo y empezar desde cero, al fin con una estrategia definida. Se le dio a Alfonso Durazo la responsabilidad, bastante compleja, de reestructurar por completo la Secretaría de Seguridad y, a al mismo tiempo, se le encargó la tarea de dar forma a la Guardia Nacional.

El hecho es que, como dije antes este escrito, el asesinato de la familia LeBarón se dio en el contexto del país destruido por la guerra de Calderón, que la 4T está intentando detener para pacificar a México.

Se hizo bastante al investigar el crimen y se logró detener a algunos de los delincuentes. El entonces secretario de Seguridad, Durazo, no suspendió su trabajo de cambiar la dependencia, no solo porque no le correspondía investigar, sino porque lo importante era ya terminar de diseñar y de llevar a la práctica los instrumentos, como la Guardia Nacional, de la nueva estrategia para combatir la violencia.

¿Por qué ahora, cuando Durazo ya no es titular de Seguridad, sino candidato a gobernador de Sonora, ha sido denunciado ante la Fiscalía General de la República por Bryan LeBarón?

Con respeto para el dolor del señor LeBarón me parece que su denuncia obedece a politiquería. Alguien debe haberlo convencido de prestarse a tratar de restarle posibilidades de triunfo al candidato de Morena en Sonora.

No me sorprende lo anterior.  

Las encuestas

En octubre del 2020, El Heraldo Media Group comenzó a publicar encuestas electorales para los 15 estados en los que habrá cambios en las gubernaturas.

Morena ganará en la mayoría de las entidades, como se verá a continuación, pero…

En octubre arrasaba en 14 estados. Solo en Querétaro, el PAN superaba a Morena.

Hoy las cosas han cambiado. Las más recientes encuestas de El Heraldo —realizadas por la casa encuestadora Opinión Pública Marketing e Imagen y la consultora Social Research Solutions— hablan de un escenario electoral bastante más competido.

Además de Querétaro, la oposición pelea a Morena con posibilidades de éxito los estados de Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Nuevo León y San Luis Potosí.

El partido del presidente López Obrador sigue con una importante ventaja en Baja California, Colima, Michoacán, Nayarit, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.

En Sinaloa sigue adelante Morena, pero ya no con la enorme ventaja de octubre. Y en Guerrero, hay que destacarlo, ha disminuido la intención de voto a favor del impresentable Salgado Macedonio, famoso por su apodo de Toro  pero sobre todo por las denuncias de acoso sexual y violación agarrada en su contra. Justicia cósmica será que siga cayendo en las encuestas y pierda este tipejo, quien de octubre a Marzo ha visto reducida su ventaja en más de 20 puntos porcentuales.

La grilla contra Durazo

Los estados más importantes en disputa son Nuevo León, Querétaro, Sonora, Baja California y Chihuahua. La oposición tiene posibilidades en tres de ellos: en Nuevo León, Adrián de la Garza, del PRI, está en las encuestas muy cerca de Clara Luz Flores, de Morena; en Querétaro, arrasa Mauricio Kuri, del PAN, y en Chihuahua es mucho muy competitiva la señora Maru Campos, del PAN.

La oposición quiere más. La alianza del PRI, PAN y PRD sabe que con Lupita Jones no puede aspirar a la victoria en Baja California, entre otras razones porque la entidad la administra Morena con un gobernador fuerte como Jaime Bonilla.

Sonora, por contar con una gobernadora priista, Claudia Pavlovich, —muy popular, por cierto— es una entidad que la oposición ve como rescatable para el PRI, el PAN y el PRD. Así lo han diagnosticado desde antes del arranque de las campañas. Confiaron en la popularidad, innegable sin duda, de su candidato Ernesto El Borrego Gándara. Pero, la verdad de las cosas, este ha decepcionado.

El escándalo Beltrones

En las encuestas de El Heraldo la ventaja de Durazo sobre Gándara en lugar de disminuir, ha crecido, y mucho. Y seguramente más crecerá con el escándalo de las cuentas en la Banca Privada de Andorra que tuvo la senadora Sylvana Beltrones Sánchez, hija del que es probablemente el político más polémico en Sonora, el exgoberanador Manlio Fabio Beltrones Rivera.

Curiosamente la denuncia de Bryan LeBarón contra Alfonso Durazo se difundió pocas horas después de que El País diera a conocer las famosas cuentas en Andorra de la senadora Beltrones.

No me parece una forma eficaz de intentar emparejar el marcador. Tampoco es una manera ética de competir.