Soy una mujer mexicana que busca, como casi todos, y cree que se pueda lograr, un México mejor. Hasta hace poco empecé a seguir por Twitter a Andrés Manuel López Obrador, pues me empieza a parecer interesante la forma en que tuitea, además de que sin lugar a dudas es un muy buen líder de opinión y porque, por otro lado me parece que merece ya demostrarnos lo que desde hace años nos ha prometido: un verdadero México con esperanza, con cambios, en paz .
Pero he notado que su discurso "tuitero" está mal encaminado, estoy segura que quiere o intenta decir una cosa, pero se le interpreta otra, o entre líneas se lee otra cosa . Y esto, creo e intuyo es por su apasionada forma de pensar que lo lleva a escribir apasionadamente sin detenerse a releer el mensaje que está queriendo dar.
Cito hoy el tuit que puso acerca de la captura de Javier Duarte en donde se lee: “Detienen a Duarte para simular que combaten la corrupción. Pero el Pueblo no se conforma con CHIVOS EXPIATORIOS, quiere la caída del PRIAN”.
El mensaje que se entiende y que muchos entendieron y por eso lo están atacando es: Javier Duarte no hizo nada, es inocente y déjenlo en paz, porque es un pretexto del gobierno para lavar culpas...
Lo que Andrés Manuel quiso decir , desde mi particular punto de vista es: La detención de Duarte es una argucia política, el pretexto perfecto, un movimiento o estrategia de el PRI/PAN, para que la gente diga: “¡Mira! Actuaron bien, se hizo justicia” cuando en realidad es claro que si se hizo justicia, también me parece se sacaron un haz de la manga para reposicionar al PRI.
Me queda claro que Andrés Manuel López Obrador es el que maneja su cuenta, pero también el apasionamiento natural que hay en él hace que su discurso tuitero le acarree malos entendidos y que sus detractores se aprovechen de esto para denostarlo.
En estas épocas de competencias electorales y de partidos, creo fielmente que el Twitter es una poderosísima herramienta pero también peligrosísima, la cual debe de ser usada con cautela, inhalando y exhalando antes de escribir un tuit para no caer en falsas interpretaciones y lecturas erróneas.
Ojalá Andrés Manuel López Obrador entienda esto y quizá busque a alguien que si bien, no maneje su cuenta porque el sello de él es precisamente ese, su intención de generar siempre opiniones personales, sí sería muy útil que se apoyara de gente que le ayude a clarificar ideas para que sean del entendimiento real de las personas y así transmitir el mensaje que él quería dar. Porque hoy que Andrés Manuel está en su punto más alto, cualquier resbalón tuitero pudiera costarle mucho.