Es muy singular el caso del neocolonial periódico español El País. En lo que parece una eterna añoranza de la época de “gloria” de su fallido y efímero imperio cimentado en la invasión y el exterminio de pueblos originarios de nuestro continente, el periódico ibérico parece tener una obsesión en su línea editorial sobre lo que ocurre actualmente en México y en específico, de las acciones de su gobierno, encabezado por AMLO.
Curiosamente, bajo cualquier parámetro, el gobierno de España lo está haciendo mucho peor que México en el contexto de la pandemia del nuevo coronavirus. De acuerdo al cálculo de muertes por cada millón de habitantes recabado por el sitio Worldometers, España está en el sitio 6, con 710. La “colonia” (según los reaccionarios españoles) mexicana, se encuentra en el lugar 11, con 653. En el caso económico, el FMI acaba de señalar que España es el país con la economía más golpeada por el coronavirus, mientras que los mismos organismos económicos internacionales han revisado la contractura de la economía mexicana a términos más severos. Y así, sucesivamente. Con el desastre de las autoridades españolas en el manejo de la pandemia y la crisis económica de un país dependiente y codependiente el turismo, uno no puede hacer otra cosa más que desconfiar de la obsesión de este diario ultraderechista y neoliberal con el gobierno y la nación mexicana.
En el marco de líneas editoriales con mala leche como las de El País y de fake news que reproducen muchos medios supuestamente “serios”, el mandatario explicó cómo fue el proceso en que ¡por fin! decidió abrazar las redes sociales.
“La primera vez que usé Twitter para replicar fue para responder a una editorial de El País de España. Titularon la editorial: ‘Obrador, un lastre’, esto después de la elección del 2012. Por eso estoy hablando de hace 8 años, que era una gran cargada a favor de Peña y ya era apostar a liquidarnos”.
AMLO
La cargada de la que habla el presidente no es casualidad, sino que va acompañada de dos ejes ideológicos que debemos recordar apenas a unas horas del “festejo” español por el “descubrimiento” de América a manos de un mercenario asesino como Cristóbal Colón, a las órdenes de dos codiciosos reyes españoles: el primero, la detestable actitud neo-colonial de un país cuyas autoridades se rehúsan neciamente a enfrentar su pasado y el segundo, el fin de la era del “salvaje oeste” neoliberal en donde empresas españolas convertidas en grandes vampiros trasnacionales saqueaban y pillaban a placer territorio mexicano, con la complicidad y el aplauso de élites mestizas apátridas y corruptas que, para colmo de males, se creen españolas, o “criollas”.
AMLO, con el lenguaje popular atractivo para millones de simpatizantes que lo siguen, denominó la actitud de El País y otros medios extranjeros (recordemos una vergonzosa portada del pasquín norteamericano Time con Peña Nieto, en donde lo declaraban como quien estaba "salvando a México") o con un término más sencillo: lambisconería.
“¿Por que la actitud de El País para con nosotros y porque la lambisconería de El País con EPN?. Pues porque estaban las empresas españolas en México en su apogeo. Con Calderón, Repsol y con Peña OHL, Iberdrola y todas esas”.
AMLO
Nuevamente, el presidente señaló que las redes sociales, con todos sus aspectos negativos, han sido al menos desde 2012 una herramienta muy importante para contrarrestar los embates de diarios nacionales e internacionales como El País, que buscaron durante décadas evitar que su proyecto político progresista llegara al poder.
Personalmente y a modo de conclusión, me parece risible, además de una actitud racista y neocolonial, la obsesión con México y su gobierno de los señores (¿cñores?) editores y escritores de El País. ¿Qué es lo que buscan? ¿Más jugosos negocios, o la exportación de su fallido “modelo democrático” en donde se mantiene a una pandilla e parásitos “reales” aún con la mayoría de los encuestados señalando que se encuentran a favor de otra república?