La página Consumer Reports asegura que el Galaxy S7 Active no es lo que aseguran los anuncios de Samsung, que lo califican como resistente a los golpes y con IP68, es decir, resistente al polvo y agua.
Para comprobar su efectividad dos dispositivos idénticos del modelo S7 Active fueron sumergidos a 5 pies de profundidad por un periodo de 30 minutos, ninguno sobrevivió a la prueba: la pantalla se estropeó, las cámaras se llenan de burbujas y la entrada SIM se humedece.
Aseguran que no es una característica que los compradores tomen mucho en cuenta para adquirir un equipo pero tratan de prevenir para los usuarios más aventurados que les gusta usar sus dispositivos dentro del agua.
De los tres modelos disponibles de la serie S7, el Active fue el único en registrar ese defecto.
La respuesta de Samsung
Samsung se defendió de las acusaciones a través de un comunicado, afirmando que el S7 Active ha recibido muy buenos reviews, y que para su certificación de IP68 “ha pasado por estrictas pruebas de control de calidad para asegurarse de que cumple y supera los estándares de la industria” y que "puede haber un dispositivo defectuoso que no es tan hermético como debe ser".
Con información de The Register.