Una futura versión del Apple Watch podría integrar una tecnología para monitorear la frecuencia cardiaca de los usuarios, usando señales eléctricas para detectar anomalías cardiacas y otros posibles indicadores de enfermedades cardiovasculares.
Según un informe de Bloomberg, una forma en que la compañía estadounidense podría integrar el lector de electrocardiograma (EKG, por su abreviación en inglés) sería a los costados del reloj, haciendo que los usuarios sostengan el dispositivo para enviar una débil corriente eléctrica a su corazón.
Las pruebas tradicionales de EKG se realizan utilizando múltiples electrodos que se colocan directamente sobre la piel, con el objetivo de monitorear los patrones eléctricos que normalmente son imperceptibles entre los latidos del corazón.
En caso de lograr integrar el lector en el Apple Watch, la compañía podría prevenir a los usuarios en riesgo de accidente cerebrovascular o insuficiencia cardíaca a través de un flujo constante de datos que facilitará el diagnóstico médico.
Apple lanzó en noviembre un nuevo estudio en sociedad con la Universidad de Stanford, registrando los latidos cardíacos irregulares con ayuda de los actuales modelos de Apple Watch, aunque estos aún se encuentran limitados por el tipo de sensores que integran.
Con información de Engadget.