Estados Unidos.- Brandon Strohbehn y su novia Nicole, decidieron emprender una romántica aventura, saltar en paracaídas.
La pareja subió a bordo de un aeronave hasta alcanzar más de 1000 metros, llevaban 8 meses de novios así que confiaban el uno en el otro.
Ya en las alturas, Brandon le tenía preparada una sorpresa a Nicole, de su traje especial para el salto, sacó un estuche cuadrado, lo abrió y ¡santo cielo! (literal porque estaban en el cielo), apareció un reluciente anillo de compromiso. ¡Te amo! dijo emocionado Brandon.
Nicole no podía creerlo, le estaban pidiendo matrimonio de la mejor manera que alguien pudo hacerlo. Pero, en cuanto se animó a tomar la sortija ¡zas! los fuertes vientos y el movimiento de los emocionados novios, provocó que el anilló cayera al vacío.
Pero no se asusten, todo estaba preparado por Brandon. Al aterrizar, los novios eran esperados por familiares y amigos, ahí Brandon pidió formalmente matrimonio a Nicole, con anillo y toda la cosa.
La pareja que vive en San Diego, California, han hecho unos 224 saltos de este tipo juntos, por eso a Brandon le pareció la manera ideal de pedirle al amor de su vida que se casara con él.
Con información de Metro