Un cuidador de Phuket, Tailandia, estuvo a punto de perder el brazo derecho luego de que un cocodrilo le mordiera la mano.
El reptil realizó un 'giro mortal' tras aplastarle la mano al entrenador. Esta rotación sobre su propio eje longitudinal es común y la ejecutan cuando desean desmembrar a su presa.
No obstante, Anusak Salangam, quien lleva muchos años trabajando con cocodrilos, dio un giro similar al mismo tiempo, con lo que pudo salir ileso. De acuerdo con el centro sanitario, sólo sufrió cortes menores.