El parto sucedió en el Hospital Santa Casa de Misericórdia de Barretos, Brasil, sorprendiendo a médicos, madre y a miles de usuarios en Facebook.

El bebé nació dentro de su saco amniótico, lo que significa que fue un parto velado, también conocido como 'enmantillado', de esos que sólo pasan una vez en cada 80 mil nacimientos.

Aunque cientos de internautas cuestionaron a los doctores por "no hacer nada para que el bebé respire", olvidaron lo obvio: después de nacer, el cordón umbilical sigue latiendo y recibiendo oxígeno y nutrientes durante unos minutos.