Yucatán, para ser más precisos, tiene un alto grado de similitud con Querétaro. La primera entidad, en retrospectiva, fue presumida por la dirigencia del PAN por los altos índices de aprobación que, hace poco, tuvo el exgobernador, Mauricio Vila. Acción Nacional, en ese entonces, elaboraba spots, comerciales y presumía números de algunas encuestas que circulaban en el Ranking de Gobernadores en las primeras posiciones de respaldo ciudadano. A nuestro juicio, no había mucha justificación para tomar muy en serio una ponderación tan elevada si comparábamos la solidez de otras entidades federativas, especialmente porque, en ese momento, la Cuarta Transformación, además de vivir su llegada al poder, experimentaba un equilibrio en pro de llegar a su mayor apogeo.
Eso empezó a reflejarse en cuanto hicimos un comparativo de los números que, en ese momento, promediaba el propio Andrés Manuel López Obrador. En todas las entidades, sin excepción alguna, AMLO estaba muy por encima de la aprobación de gobernadores, incluyendo las que estaban en manos de la oposición. Fue el caso de Yucatán, que hasta hace poco era considerado uno de los epicentros claves de la derecha a nivel nacional. Entre ellos, sobra decir, hay muchos otros que conservan el panismo, pero que, de acuerdo con los propios pronósticos, penden de un hilo ahora que Morena se ha consagrado como la primera fuerza política del país.
Marko Cortés, otrora presidente de Acción Nacional, no se cansaba de presumir a Yucatán como uno de los bastiones del PAN antes de las elecciones del 2024. Recordemos que en esa fecha, además de que se elegiría al relevo de Andrés Manuel López Obrador, estaban en juego nueve entidades federativas que, por su importancia, llamaron poderosamente la atención. Recuerdo que, en aquel entonces, Cortés salió feliz a una conferencia de prensa anunciando triunfos en Veracruz, Ciudad de México, Morelos y Yucatán. Horas después, desencajado ante la mirada escéptica de Xóchitl Gálvez, no tuvo más remedio que reconocer la debacle que se le venía encima, especialmente en Yucatán, pues los resultados preliminares empezaban a marcar distancia a favor de Morena en el sur del país.
No sirvió de nada utilizar encuestas de poca credibilidad para presumir los altos índices de aprobación que, en aquel entonces, promediaba el exgobernador de Yucatán. El responsable directo fue el mismo Marko Cortés, si hacemos un control de daños de la situación que se vivió; es decir, no pudo ni refrendar el triunfo en enclaves importantes como Yucatán, donde depositó grandes expectativas, especialmente por esos niveles de aprobación que alardeaba. El punto es que, como tal, Morena terminó por ganarle y, con ello, rompió cualquier pronóstico. Eso, por ejemplo, se percibe que puede llegar a suceder en Querétaro. En este momento, en una demostración clara de superioridad, Claudia Sheinbaum tiene mayor respaldo que Mauricio Kuri. Eso, me parece, puede ser uno de los componentes que allanen el camino para la alternancia en aquel punto de la república.
Ahora comprendemos ese discurso que mencionó el propio Mauricio Kuri ante la militancia del PAN. Prometió, con esas palabras, que no entregaría el gobierno a Morena. Dijo, con una connotación distinta pero clara, que no cederá la estafeta a Morena. Eso, de entrada, deslizó una enorme preocupación ante el crecimiento que ha tenido el lopezobradorismo, especialmente en Querétaro. Por eso se ha generado un clima de polarización, hasta cierto punto. Se anticipa, si nos guiamos por la percepción de la ciudadanía, y las propias encuestas que viene jugando un papel preponderante, una contienda muy cerrada en Querétaro. Hay evaluaciones que, por ejemplo, ponen al partido guinda en igualdad de condiciones; otras, que hay que tomarlas muy en serio, y que colocan a la coalición Seguimos Haciendo Historia con una ligera, pero significativa ventaja sobre el panismo.
La dirigencia del PAN, que usa cualquier circunstancia para meterse a los temas de la agenda pública, presumen ponderaciones numéricas que, por su inexactitud, podemos calificarlas como amorfas. A Mauricio Vila, por ejemplo, no le sirvió de nada, en su momento, estar en la cima de los gobernadores más evaluados, pues el destino o, las mismas circunstancias de un avance progresista, contribuyeron al triunfo inminente de Joaquín Díaz Mena, que rompió todos los pronósticos y planes de la oposición. He ahí la enorme diferencia que se mostró entre un proyecto y otro, y los alcances que puede tener el efecto de Claudia Sheinbaum, calificada como una de las mujeres más poderosas del mundo.
La misma Claudia Sheinbaum, que ha ido aprendiendo tanto de los procesos electorales, sabe la importancia que tiene Querétaro. Ella, por su investidura, ha cuidado las formas y, de paso, ha instruido a no adelantar vísperas en los ejercicios democráticos; sin embargo, es un hecho que, entre sus planes, está ir a la conquista de Querétaro. Vemos, de manera muy clara, toda la infraestructura que ha echado andar para seguir fortaleciendo todas las políticas públicas. Eso, como tal, ha permeado mucho en la población civil de aquella demarcación del país. Por eso hacemos un comparativo entre Yucatán y Querétaro; hay una similitud que puede ser el punto crucial para que la alternancia llegue. De hecho, tenemos que echar un vistazo al salto importante que ha dado Morena en tierras queretanas. Para tal efecto, la militancia ha comenzado a movilizarse; la prueba más sólida, aunque al gobernador Mauricio Kuri no le guste, es el despegue de la simpatía por el lopezobradorismo, incluyendo el apoyo irrestricto que ha recibido Sheinbaum con más del 62% de aprobación.
Y si a eso le sumamos que el PAN, envuelto en una crisis profunda, ha caído a la cuarta posición como fuerza política, eso acelera el despegue de Morena y, con ello, se generan grandes expectativas de que llegue al poder en Querétaro. Eso, como tal, son situaciones que ni el propio Kuri puede impedir, pues el pueblo, fieles a la causa lopezobradorista, se expresa a favor de la alternancia en Querétaro. De hecho, tenemos la certeza de que un hombre encabezará la coalición Seguimos Haciendo Historia, que, con esa capacidad que mostró para la fórmula del Senado hace unos meses, le vemos grandes posibilidades. Esa esperanza de alternancia se ha depositado en él, que hoy tiene una encomienda clave en el desarrollo de la economía en México. Todos sabemos a quién nos referimos.
Notas finales
Evelyn Salgado, una de las gobernadoras mejor evaluadas en México, de acuerdo con las encuestas de mayor confianza, ha realizado un buen trabajo de coordinación con la presidenta constitucional. La misma Claudia Sheinbaum, que se ha comprometido con ese enclave, especialmente por lo que aconteció en Acapulco, a realizar una inversión histórica para apuntalar el desarrollo económico y, con ello, regresar el potencial turístico que siempre ha demostrado tener uno de las playas más hermosas para vacacionar. Eso, entre muchos aspectos más, se llama tejer fino de parte de Evelyn, en especial porque ha sabido, con esa capacidad tan amplia, encontrar puentes de comunicación para beneficio social de Guerrero, que lo merece por sus bellezas naturales, pero sobre todo porque es un territorio de gente trabajadora. A propósito de ello, vimos muy de cerca a Félix Salgado Macedonio, con la misma jefa de Estado. A él, por el fenómeno social que constituye, hay que seguir considerándolo seriamente en la carrera por la gubernatura que, sea como sea, no tiene nada que ver con una concepción de nepotismo.