Hace unos días, la alcaldía Miguel Hidalgo informó la destitución de dos funcionarios que supuestamente participaron en actos de corrupción. Tal anuncio obedeció a la inmediata instrucción del alcalde Mauricio Tabe de cesar a ambos funcionarios de sus cargos y solicitar al órgano interno de control de la demarcación su respectiva investigación.

Esta acción parece enviar un claro mensaje para todo aquel que labore en esa alcaldía, en especial para aquellos que por atribuciones de su cargo de atender directamente a vecinos, intenten pasarse de “listos”. También se trata del esfuerzo de un gobierno por hacer mejor las cosas y erradicar las malas prácticas como la extorsión y corrupción tan arraigadas en la administración anterior.

Cabe recordar que a inicios de este año, la Auditoría Superior de la Ciudad de México emitió sendas observaciones a la Cuenta Pública del año 2020, entre las cuales destacó una durante la gestión del morenista y ex alcalde Víctor Hugo Romo sobre la entrega de apoyos del programa La Empleadora a 57 trabajadores del gobierno de la ciudad.