Los mandatarios son los que mandan, desde siempre y hasta ahora, y por ende, deberían tener, en la mayoría de los casos, la razón.
Para saber si un mandatario tiene la razón, se debe conocer cabalmente la situación que está manejando, esto obviamente no se trata de algo simple, pero es imprescindible para saber si dicho mandatario tiene o no la razón.
Por eso resulta muy privilegiado tener las herramientas intelectuales y estratégicas para saber si los mandatarios en la actualidad tienen la razón en cuanto a sus decisiones y determinaciones personales, para así resolver las situaciones actuales mundiales, incluyendo a mandatarios de la talla de Vladimir Putin, de Joe Biden, de Naftali Bennett, de Lula DaSilva o de Andrés Manuel López Obrador, por mencionar a los más nombrados en los medios de comunicación.
El mejor aliado de los intelectuales que analizan a los grandes mandatarios en cuanto a su actuar, es la misma historia, la que se cuenta, se escribe, y se registra, en ese orden, y la cual, siempre es fidedigna.
Pero lo más importante de recapitular en el presente ensayo en base al cuadro ya expuesto, es que no debemos esperar a que la Historia demuestre que un mandatario, en su momento, no tenia la razón, y sería así una obligación de las mentes privilegiadas con la capacidad de análisis, que son pocas, que actúen a tiempo para hacer notar a los mencionados mandatarios que no están actuando en base a la razón universal, a tiempo.
El mejor ejemplo al respecto moderno es el del mismo Hitler, si alguna gran mente lo hubiera convencido en 1936, cuando su amada Alemania fue sede de los Juegos Olímpicos, que desistiera de su obsesión antisemita, que no tenía la razón al respecto, hoy, Alemania, y el mundo entero, hubieran brillado mejor.
Charles Chaplin intentó con su película “El gran dictador” de 1940 decirle a Hitler que estaba equivocado… pero ya era demasiado tarde.