CONDENANDO LÍNEAS
Una vez más, lo que se ha vivido en el futbol mexicano es realmente penoso por parte del arbitraje, porque no solo se trata de marcar de una manera más justa, se trata de entender de mejor manera este deporte y dejar de esperar que desde arriba te digan que hacer.
Es momento de buscar cómo hacer verdaderamente eficiente al VAR, porque no puede ser que cada jornada se sigan cometiendo errores tan graves que afecten tanto a los clubes. Ya basta de seguir permitiendo tanta estupidez por parte de los exárbitros de medio pelo, que cuando estuvieron en el terreno de juego demostraron no tener capacidad y que hoy son premiados como changos frente a un monitor para señalar jugadas que no existen o hacerla de jueces por el simple hecho de perjudicar a alguien en particular.
No se trata de bajarle la velocidad a las jugadas y señalar todo lo que suceda en el campo, se trata de tener sentido común, el cual me queda claro que estos personajes no tienen y lo más grave de toda esta situación es que ahora se dan el lujo de inventar acciones que no existen.
Volvemos con el tema, jornada tras jornada las marcaciones son muy distintas, y al no haber similitud entre una jugada y otra, los mismos futbolistas parecen estar perdidos, por no entender realmente cuál es una jugada de roja y cuál ni siquiera alcanza para amarilla, hoy ya no se trata del reglamento, parece que las marcaciones se dan de acuerdo a lo que en ese momento el silbante decida, sin importar la forma en la que se podría incluso interpretar una regla.
Dejemos de creer que hay favoritismo por parte de los hombres de negro, aquí lo que es un hecho, es que estos personajes no son malintencionados, simplemente son personas con muy poca capacidad para realizar las funciones que se les tienen que exigir al estar como máxima autoridad en el campo.
El arbitraje tiene muchos años en los que no atraviesa por su mejor momento, pero el problema sigue estando en los que programan o aquellos que no se dan cuenta de los errores tan graves que comenten sus dirigidos. Para este torneo se fue Arturo Brizio y llegó Armando Archundia, algo que en el papel parecía ser un buen movimiento por el desgaste natural que se dio con Arturo y que con la llegada de alguien nuevo se esperaba que viniera un cambio real aunque este no ha llegado y no se ve como pueda darse cuando la mano de obra con la que se cuenta es tan limitada.
Lo que sí es una realidad actualmente en nuestro balompié, es que los árbitros con los que cuenta el futbol mexicano, son malos, pero parejos.