El G7 – o Grupo de los Siete-  es la agrupación que reúne a las siete principales economías del mundo, a saber, Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Canadá, Italia, Japón y Alemania. Se trata de una reunión del más alto nivel en la cual participan todos los jefes de Estado y de gobierno de sus miembros, así como los presidentes de la Comisión Europea y del Parlamento Europeo como representantes de la Unión Europea.

La última reunión del G7 tuvo lugar hace unos días en Cornualles, Inglaterra, y fue inaugurado por la reina Isabel II, en tanto que jefa de Estado, y presidido por el primer ministro Boris Johnson, como jefe del gobierno británico.

En este contexto, enuncio enseguida los principales objetivos y logros alcanzados tras la reunión de las siete grandes potencias del globo:

1.- Se acordó fortalecer la cooperación internacional en materia sanitaria, con el propósito de poner fin a la crisis de la covid-19 y evitar futuros rebrotes epidemiológicos. De igual manera, el presidente Joe Biden y sus aliados se comprometieron a donar 1,000 millones de vacunas al mundo en desarrollo.

2.- Reforzaron la cooperación multilateral contra el cambio climático, tan alarmantemente puesto en la agenda pública mundial tras la ausencia de acciones derivadas de los compromisos internacionales en materia de reducción de contaminantes y gases de efecto invernadero.

3.- El presidente Biden puso el acento en el hecho de que la diplomacia estadounidense estaba de vuelta tras cuatro años de aislacionismo frente a Europa durante el gobierno de su antecesor. Él y Anthony Blinken, secretario de Estado, hicieron hincapié en la necesidad de contrarrestar la influencia china y en la necesidad de articular mecanismos que limiten al gigante asiático.

4.- Los aliados reforzaron la idea de impulsar el respeto a la democracia y a los derechos humanos como principios inalienables de las relaciones internacionales. Esto fue dirigido, bien vale señalar, a los regímenes autocráticos como China, Turquía y Rusia. Según lo anunciado, los miembros del G7 buscarán obligar a sus socios comerciales a respetar estos valores fundamentales.

A pesar de los logros aparentes, el encuentro del G7 no estuvo exento de roces y diferencias. Boris Johnson tuvo un desacuerdo con el presidente francés Emmanuel Macron en torno a las tensiones existentes entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, así como en el incumplimiento de Londres de los acuerdos signados tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Luego del G7, Joe Biden viajó a Bruselas, donde se reunió con los miembros de la OTAN. A diferencia de su impresentable antecesor, el presidente estadounidense reafirmó el compromiso histórico e institucional de su país en la defensa de los intereses de Occidente frente a las intenciones expansionistas de la Rusia de Putin y ante la creciente presencia de China en el mundo.

En suma, el G7 representa la reunión política de más alto nivel en el mundo. Toda decisión tomada en su seno conlleva consecuencias inevitables en cada región de planeta, y resulta bien importante estar informados.