Han pasado más de diez días de campaña presidencial y, como se ha hecho una costumbre, Claudia Sheinbaum continúa creciendo en las encuestas de opinión pública. De hecho, cada vez que se divulga un estudio atestiguamos el ascenso en la intención del voto. De igual forma, el número de indecisos se ha ido reduciendo y, a su vez, se están inclinando por la causa del lopezobradorismo. Eso significa que, tanto en la percepción, como en el esquema de propuestas, la abanderada de la coalición “Seguimos Haciendo Historia” sigue construyendo las condiciones para llegar a Palacio Nacional. Se estima, en efecto, que más de treinta millones de votantes inclinen la balanza con la alianza que encabeza Sheinbaum.

Los mismos actos públicos y la inmensa cantidad de simpatizantes que se reúnen en cada espacio nos permiten, además de cuantificar, darnos una idea de la efervescencia que, a lo largo y ancho del territorio nacional, se siente por esta transición democrática que viviremos. Ese impulso, en efecto, se percibe en la antesala del comienzo proselitista en otros puntos que, sabemos, iniciarán campaña en unas semanas más. De hecho, eso facilitará más el activismo a favor de Claudia Sheinbaum. Mientras ella siga recorriendo el país, los abanderados de las nueve entidades federativas serán, por tanto, activos políticos que continuarán afianzando el nombre de Sheinbaum y, a su vez, alimentar de propuestas su programa de gobierno.

Morena en este momento, domina 8 de 9 entidades federativas que tendrán relevo en el ejecutivo estatal. Hay, evidentemente, una fiebre social para cimentar el segundo piso de la 4T y desde luego, ese mismo efecto es el que se vive en todo el país. Lo hemos dicho en otros espacios de opinión, Morena saldrá muy favorecido en respaldo ciudadano. Esa inercia, a propósito, se siente con intensidad en Tabasco, Chiapas y Veracruz. Se trata, queda claro, de las tres entidades que, por números y proporción, tienen un despegue potencialmente superior a los demás.

No tengo duda que Claudia Sheinbaum ganará las 32 entidades federativas. Algunas de ellas, con ese paso, lo harán en mayor proporción. De acuerdo con la encuesta de encuestas, esas tres entidades promedian la intención del voto más holgada a nivel nacional. Para mencionarlo más concretamente, cada una de ellas, en proporción, tiene un margen de casi el 70% a su favor. Eso significa, además de que la población tomó su decisión de apoyar a Morena, que es una determinación definitiva. Su ventaja, de hecho, es el principal común denominador, el factor que, indudablemente, es el que marcará la gran diferencia del triunfo contundente.

En Chiapas, por ejemplo, Eduardo Ramírez ha despegado significativamente con un paso imponente. De acuerdo con la encuesta de encuestas, la entidad del sur tiene una intención del voto del 69%. De hecho, ese corte de caja se hizo en los primeros días de marzo. Hablamos de una diferencia de 46 puntos a favor de Morena. Siendo sinceros, no es algo fácil de superar. Es más, es un trecho imposible de revertir. Tendría que pasar una hecatombe política para rebasar el margen o, de plano, algún milagro que, déjenme decirles, no sucederá ni con los pactos de sangre que, de manera ridícula, hace Xóchitl Gálvez.

Es sencillo: Eduardo Ramírez será gobernador constitucional de Chiapas, que no quede duda de ello. No hay manera de revertir un trecho de esa magnitud. El peso de las encuestas y el fenómeno social que constituye en estos momentos el ex coordinador de los senadores de Morena, por supuesto, influye para seguir despegando en aras de construir el segundo piso de la cuarta transformación en Chiapas.

Eso mismo pasará, ni más ni menos, en la tierra natal del presidente López Obrador. Javier May, en este momento, promedia más del 70% de la intención del voto. En ese sentido, el mandatario federal, una vez que termine su gestión en Palacio Nacional, se puede retirar tranquilo a descansar. Ganará la presidencia de la república, lo mismo que 8 de 9 gubernaturas, incluyendo Tabasco. De hecho, lo hará con un imponente paso que, desde este instante, nos anticipan las encuestas. Siendo así, podemos dar por hecho que, el próximo dos de junio, en todo el territorio tabasqueño se celebrara un proceso de continuidad por segunda vez consecutiva.

La historia, de igual forma, se repetirá en Veracruz, con un paso sólido de Rocío Nahle en las encuestas. Para ser más exactos, dos terceras partes de la población o votantes, ha hecho ver su respaldo a la candidata de Morena. De hecho, el promedio de Nahle, al igual que en Chiapas y Tabasco, ha mostrado un despegue significativo. Eso significa que, la extitular de la Secretaría de Energía, tiene la victoria en la bolsa. Triunfo cantado en esas tres entidades, además desde luego, que en CDMX, Morelos, Jalisco, Yucatán y Puebla.