ESTIRA Y AFLOJA

Evidentemente el futbol mexicano es un entre privado, donde toman las de cisiones que se les pega la gana y no deben ir en relación a lo que opina el público, aunque sí debieran de considerarlo.

El aficionado es quien hace una liga, simple. Es quien compra boletos, camisetas, banderas, gasta en esquilmos en los estadios, y claro, el patrocinador, que paga millones y millones de pesos, lo que requiere es que sus marcas se vean, se posiciones.

Por eso la credibilidad es importante, demasiado importante. Esa misma que la Liga MX pierde por un aparato de justicia sobrepasado por la soberbia, la mala capacitación, formación y hasta por la ignorancia en algunos casos.

Definitivamente, no hay tendencias para favorecer o perjudicar a algún equipo determinado. Esos inventos del “periodismo” que escribe o habla en los medios con la bufanda de su equipo puesta, no son más que una mecanismo de confusión para el público. Los periochivas, los perioamericanistas, los periotigres o los periopumas, le han hecho demasiado daño al entorno. Que por ese afán de ganar seguidores en sus redes se atreven a decir barbaridades, al final no pasa nada, nada.

Por eso es importante que la Comisión de Arbitraje se abra a la transparencia. No cuesta nada que jornada tras jornada se abran los audios del VAR con el cuerpo arbitral. Grabaciones que existen y que no pasaría nada si se dieran a conocer, o ¿temerán por algo?

Y no se trata de evidenciar los errores, sino de transparentar al futbol y que se dejen de estupideces de que este deporte está amañado, porque si así fuera el América no tendría 13 títulos, tendría no sé, 50. Y Chivas no tendrían 12, podrían tener 30 o 40. Cada quien habla de la afectación a su equipo sin ver el plano global, la película completa, esa que evidencia el pésimo nivel del arbitraje mexicano.

Abran las grabaciones, no pasará nada.