México.- El gobierno de Estados Unidos presentó este miércoles una reforma en materia fiscal que propone bajar el impuesto sobre la renta corporativo a 15 por ciento y reducir a 3 las categorías en que caen los trabajadores que tributan este gravamen: aquellos que pagan 10 por ciento, los que pagan 25 por ciento, y la categoría mayor, de 35 por ciento.
Durante el acto oficial, el secretario del Tesoro de la Unión Americana apuntó que “se trata de uno de los mayores recortes de impuestos de la historia”, que podría llevar al Producto Interno Bruto (PIB) a crecer más de 3 por ciento al año, algo que no sucede desde el año 2005.
El plan también incluye imponer, por una única ocasión, un gravamen a capitales en el extranjero, para obligar a los inversionistas a repatriar su dinero.
Llama la atención que el presidente Trump no incluyó en esta propuesta de ley su tan adelantado impuesto fronterizo, que le restaría competitividad a México y, al mismo tiempo, elevaría considerablemente el precio de cientos de miles de productos que consumen todos los días los estadounidenses.