La petrolera española Repsol presentó ante un tribunal federal de Nueva York una demanda civil colectiva contra el Estado argentino por la expropiación del 51 por ciento de YPF con el fin de obtener una indemnización económica.


La demanda, que se puede consultar hoy en el registro electrónico del sistema judicial estadounidense, fue presentada por Repsol y el fondo de inversión Texas Yale Capital Corporation y recayó en el juez federal, Thomas Griesa.


Los abogados del grupo español en Nueva York pretenden también que el tribunal obligue al Gobierno argentino a lanzar una Oferta Pública de Adquisición (OPA) por YPF tras la expropiación consumada el pasado 3 de mayo.


En la demanda, de 27 páginas, Repsol alega que Argentina violó sus obligaciones contractuales al no lanzar una OPA por la petrolera tras retomar el control de YPF, y pide que le precio de la oferta se fije de acuerdo a lo que establece la ley.


Los abogados añaden que mientras no se lance es OPA las acciones expropiadas por Argentina ‘no puedan ejercer su derecho a voto, ni recolectar dividendos ni ser tenidos en cuenta para el cómputo del quórum de constitución de las correspondientes Juntas Generales’.


En paralelo, Repsol inició este martes los trámites para llevar a un arbitraje internacional la nacionalización de YPF con la remisión de una carta a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, en la que declara la existencia de una controversia en la expropiación.


Ahora se abre un plazo de seis meses para que las partes intenten llegar a un acuerdo antes de que Repsol presente definitivamente una demanda arbitral ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones del Banco Mundial (Ciadi).


Las acciones de YPF que se negocian en la bolsa de Nueva York caían hoy un 7,1 por ciento después de que Repsol presentase la demanda contra el Estado argentino por la expropiación.


Los American Depositary Receipts (ADR) de YPF, instrumentos financieros requeridos a las entidades extranjeras para inscribir sus acciones en Wall Street, perdían hacia la mitad de la sesión 1,02 dólares para cambiarse de manos por 13,21 dólares.


En lo que va de año, esos ADR han perdido un 61,94 por ciento de su valor en la principal plaza financiera del mundo, la mayor parte después de que Buenos Aires anunciara el 16 de abril su decisión de nacionalizar e intervenir YPF, la mayor petrolera argentina.


Hasta la expropiación ordenada por el Gobierno argentino, Repsol era el máximo accionista de YPF con el 57,4 por ciento del capital, una participación que la compañía presidida por Antonio Brufau valora en 10.500 millones de dólares (más de 8.000 millones de euros).


Según Repsol, la expropiación vulnera los compromisos asumidos por el Tratado de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones firmado entre España y Argentina, por lo que esta controversia debe dirimirse ante el Ciadi.