México.- Luego de que en lo últimos días el kilo de huevo ha llegado hasta 42 pesos, gracias a la demanda estacional del periodo de Cuaresma, el laza del dólar, además de la gripe aviar en Estados Unidos. El huevo es uno de los alimentos más consumidos por los mexicanos por la rapidez en su preparación y su alto valor nutrimental.

De hecho, su consumo en México alcanzó los 22 kilogramos per cápita en 2014, con lo que el país se mantuvo como el primer consumidor a nivel mundial, según datos de la Unión Nacional de Avicultores. Lo cual se traduce en 300 huevos por persona al año, mientras que el promedio de consumo mundial está entre 140 y 160 huevos por persona.

El huevo aporta 92% de los aminoácidos y nutrientes que necesita el cuerpo para transformarlos en proteínas. ?Hay ocho aminoácidos que nuestro cuerpo no produce y que se obtienen a través de la porteína animal. Además contiene minerales y vitaminas, principalmente hierro que sirve para transportar el oxígeno en el cuerpo, vitamina A, Complejo B, ácido fólico y la colina, que ayuda al funcionamiento del sistema nervioso.

Otros productos que más se acercan a valor nutricional del huevo son el pollo, la carne y el pescado, sin embargo, suelen más caros. En el caso del atún y las sardinas, son proteína animal de menor precio que aportan los aminoácidos esenciales. La pechuga de pavo, como embutido, puede aportar cierta cantidad de proteína, aunque su contenido de sodio es mayor y no suele ser económica. 

En el caso de no recurrir a la proteína animal, puede sustituirse con la combinación de verduras con leguminosas, lentejas, frijoles, habas, garbanzos, y cereales.

Algunos de estos productos pueden equiparar el valor nutrimental del huevo, por sí solos o mediante la combinación de varios de ellos.

Por ejemplo:

En el desayuno puede sustituirse por un plato de fruta con cereales o amaranto, puede oprtarse por molletes o tacos de frijoles. En la comida, si no se puede incluir pollo o carne roja, que tienen un mayor precio, una lata de sardinas o atún puede aportar los aminoácidos de un huevo o un plato de arroz con frijoles. Verduras como la espinaca, berros y acelgas aportan el hierro y la vitamina D, del huevo, acompañados de tostadas o tortillas de maíz.

En el caso de la cena, la cual debe ser más ligera, una ensalada de verduras verdes como nopales, lechuga o espinacas con un poco de queso panela, el atún puede ser otra alternativa.

Con información de CNN Expansión