Tegucigalpa, 27 feb (EFE).- El grupo de países cooperantes con Honduras (G-16) considera que el desarme en esa nación es necesario para frenar la violencia, que en promedio está dejando unos 20 muertos diarios, indicó hoy una fuente diplomática.

El embajador de España en Tegucigalpa, Luis Belzuz de los Ríos, dijo a los periodistas que el tema estuvo en la agenda de la reunión que celebró el G-16 la semana pasada en la capital hondureña, en la que además se analizó la cooperación que necesita Honduras.

Agregó que el G-16 está de acuerdo con un desarme y que España considera que "el desarme es parte de la solución y es una condición necesaria" para que cese la violencia en Honduras.

El diplomático señaló que en la cita de los embajadores del G-16 se reiteró, además, el apoyo al secretario de Seguridad, Pompeyo Bonilla, quien ha reafirmado su voluntad de continuar con firmeza el proceso de depuración de la Policía Nacional, iniciado en noviembre pasado.

El G-16 lo integran países de Europa como Alemania, España, Francia, Italia y Suecia, entre otros, lo mismo que Canadá, Estados Unidos y organismos como la Unión Europea, Naciones Unidas, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo y Banco Centroamericano de Integración Económica.

La depuración en los cuerpos de seguridad de Honduras obedece a la implicación de agentes y oficiales en diversos crímenes y otros delitos como narcotráfico, robo de vehículos, extorsión y violaciones a los derechos humanos.

Según fuentes públicas y privadas, el 95 por ciento de los crímenes en Honduras son cometidos con armas de fuego, mientras que el cinco por ciento restante con blancas.

Algunos sectores de Honduras se oponen al desarme alegando que eso favorecería a los delincuentes y criminales, porque ellos las esconderían para seguir cometiendo delitos.

Hasta ahora no hay un registro oficial de cuántas armas están en manos de los hondureños, a quienes la ley les permite la tenencia de hasta cinco por cada miembro de una familia.

En muchos hechos violentos las armas que más utilizan las bandas de criminales son el fusil AK-47, seguido de las pistolas nueve milímetros, y en menor número ametralladoras y fusil M-16, este último de uso oficial del Ejército de Honduras.

La venta de armas de fuego en Honduras está a cargo de una empresa que pertenece al Instituto de Previsión Militar.

En lo que respecta a la colaboración de la comunidad internacional para mejorar la Policía de Honduras, Belzuz de los Ríos dijo que se puede orientar en tres áreas: la regeneración y formación de nuevos agentes, aumentar la capacidad de investigación y la seguridad con los municipios.