México.- El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, dijo que la política actual de México establece que las personas migrantes sin documentos deben ser enviadas a sus lugares de origen, “así sean de Marte”; comentarios que la organización defensora de derechos humanos, Sin Fronteras IAP, denunció como discriminatorios.
En la inauguración de la exposición “Migrantes: Una Mirada en la Historia de México”, el comisionado recordó la deportación de 311 migrantes africanos a la India, y los acusó de agredir a integrantes de la Guardia Nacional durante su estadía en el país.
“Eso es un aviso para toda la migración transcontinental, de que así sean de Marte los vamos a mandar, hasta la India, hasta Camerún, hasta el África”.
Francisco Garduño
Denuncia contra Garduño
Ante dichas declaraciones, la asociación civil Sin Fronteras IAP presentó una queja en contra del titular del INM ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) pues señalaron que “el odio obstaculiza el acceso a derechos fundamentales, dejando a un lado la violación al derecho al asilo y su principio de no-devolución”.
“Las declaraciones impactan a un amplio número de personas extranjeras, al centrarse en las afectaciones que originan la discriminación y racismo. Dichas palabras demuestran falta de conocimiento en derechos humanos del máximo dirigente del INM”.
Sin Fronteras IAP
Por ello solicitaron al Conapred que el comisionado sea sancionado y que el INM realice un protocolo de actuación para la atención de personas migrantes y sujetas de protección internacional.
El comisionado también respondió a los cuestionamientos de diferentes organizaciones nacionales e internacionales sobre la política migratoria del presidente Andrés Manuel López Obrador, mismas que sostienen que México “se ha convertido a en el muro que quería Donald Trump, con elementos militares frenando el paso de migrantes de diferentes países”.
Garduño refirió que es muy alto el gasto de recursos por tener a migrantes indocumentados en el país, además del costo político con Estados Unidos y el problema de la migración en el sur, por lo que “no es posible mantenerlos aquí”.