México.- Organismos civiles denunciaron que frente a la falta de un Sistema Nacional de Protección Integral, que se tenía contemplado dentro de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes con vigor desde diciembre de 2014, los menores de edad en México están en riesgo permanente de seguir siendo violentados.

El posicionamiento firmado por 70 organismos como la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM), Save the Children en México y la Red TDT, donde la tesis principal es que los menores son víctimas de prácticas intolerables como "el descuido, la negligencia, el abandono, el abuso físico o sexual, el reclutamiento por parte de grupos del crimen organizado, la explotación laboral infantil, la explotación sexual infantil, el tráfico de personas la detención y deportaciones".

Además derechos como educación de calidad, salud, participación, vivienda o seguridad social no son satisfechos por parte del Estado, lo cual trasciende el ámbito de actuación del asistencialismo y en su lugar requiere que los menores sean sujetos de derechos.

Datos estadísticos de la REDIM indican que, con base en cifras oficiales: 3 de cada 10 menores en México no es derechohabiente, además en estados como Guerrero y Puebla la proporción aumenta a 5 de cada 10.

En 2012, 5.4 por ciento de las adolescentes de 15 a 17 años fueron madres, sin embargo en Nayarit, Guerreo y Coahuila el porcentaje es cercano al 7 por ciento.

Por otra parte, los datos de la Encuesta Nacional Jornalera (ENJO) 2009 de la Secretaría de Desarrollo Social, indican que de 9.2 millones de personas que laboran como jornaleros agrícolas, 2 millones son migrantes y de estos el 39.4 por ciento es población indígena, mientras el 39.1 por ciento son menores de 18 años.

Con respecto al tema de la educación, las organizaciones señalaron que tres de cada 10 adolescentes de 16 años de edad no han terminado sus estudios de secundaria, mientras de cada 10 infantes que inician la primaria, 8 la terminan a tiempo para pasar a secundaria, de hecho la tasa de deserción escolar a nivel secundaria fue de 5.5 por ciento en el ciclo 2012-2013, mientras en el nivel medio superior alcanzó el 15 por ciento.