México, D.F.- La revelación de los avances en la indagatoria PGR/SIEDO/UEI-DCS/012/2009 de la SIEDO, que investiga a delitos contra la salud, delincuencia organizada y lavado de dinero en contra de 31 personas, entre ellos los ex gobernadores Tomás Yarrington Eugenio Hernández ha causado revuelo en las bancadas tricolor, blanquiazul y de izquierda.

Por su parte, el priista Alfonso Navarrete Prida calificó la difusión de avances como mera “especulación periodística”, mientras que los panistas Alejandro González Alcocer y José Luis Ovando y la perredista Teresa Incháustegui exigieron que la investigación debe concluir antes de que termine el sexenio de Felipe Calderón.

González Alcocer confió en que durante los meses que le restan a Felipe Calderón se registrarán avances concluyentes en las indagatorias ya que consideró que durante una posible gestión de Enrique Peña Nieto “sólo habrá impunidad para los priistas”.

“Este tipo de casos son los que envilecen la vida nacional y golpean a la clase política” dijo el también panista José Luis Ovando sobre las investigaciones de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).

Teresa Incháustegui, diputada perredista, consideró que no es “ninguna novedad” el nexo de Yarrington con el narcotráfico y advirtió la posibilidad de que el gobierno de Calderón no actúe contra el ex gobernador por un “acuerdo político”.

Según la indagatoria PGR/SIEDO/UEI-DCS/012/2009 de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) en 1998 Tomás Yarrington encargó al fallecido Jesús Vega Sánchez sostener reuniones con miembros del crimen organizado para recabar fondos para su campaña electoral.