México.- Aunque Reinserta se pronunció a favor de la aprobación de la Ley de Amnistía y las acciones iniciadas desde los distintos poderes y órganos de gobierno para desahogar al sistema penitenciario y proteger a un grupo, por definición vulnerable en respuesta al Covid-19, la asociación civil hizo varias recomendaciones.

Reinserta llamó a realizar acompañamiento de las personas liberadas beneficiadas con una estrategia integral en materia de reinserción social, para que se les garantice que, al salir de prisión, cuenten con servicios institucionales y apoyo comunitario suficiente para no continuar en riesgo o vulnerabilidad una vez en libertad y prevenir así la reincidencia.

Reinserta llamó a proporcionar a la sociedad información transparente y puntual sobre las distintas medidas de liberación concedidas, para dotar de confianza en que dichas medidas se ajustan a una política penitenciaria y de salud que no se oponga a la seguridad pública.

Reinserta consideró que la liberación de personas privadas de la libertad, de ninguna manera deben representar el único o principal mecanismo de atención sanitaria al sistema penitenciario en su conjunto.

Esta liberación, por el contrario, deberá ser el primer paso de muchos para garantizar la salud y la vida de las personas privadas de la libertad, de sus familias y del personal penitenciario, afirmó la asociación civil.

A efecto de optimizar las estrategias de prevención, contención y manejo sanitario de la pandemia en las prisiones, Reinserta, con la confirmación de los primeros casos de contagio de personas privadas de la libertad y personal penitenciario, había exigido tomar cartas en el asunto.

Así se puso sobre la mesa de discusión la necesidad de implementar mecanismos de liberación de personas en reclusión que desahogarán al sistema penitenciario mexicano.

Y aunque celebró que el Senado sesionara para aprobar la Ley de Amnistía propuesta en meses anteriores por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, como una ruta atingente a la atención de la pandemia en el sistema penitenciario, Reinserta criticó que no se cuente con información pública que permita estimar el número de personas privadas de la libertad potencialmente beneficiarias por la Ley de Amnistía.

Sin embargo, aclaró que no se considera que aplique a un volumen considerable, tomando en cuenta, varios de los supuestos que se prevén en el proyecto corresponden al ámbito de impartición de justicia del fuero común.

Y finalmente observó que otras rutas a partir de las cuales se pude lograr la liberación de personas vulnerables que se encuentran en prisión, son la creación de leyes de amnistía de carácter local y el indulto, que supone el perdón de la pena y puede concederlo el titular del poder ejecutivo.