México.- La Procuraduría General de la República (PGR) indica que Los Zetas pasaron de estar conformados por nueve subgrupos a solo tres células delictivas. Desaparecieron grupos como Sangre Zeta, Comando Zetas, En Círculo y el Extranjero, Unidad Zetas, Néctar Lima, Grupo Delta Zeta y Los Negros. En tanto, solo quedaron Grupo Operativo Los Zetas, Grupo Operativo Zetas (sic) y Fuerzas Especiales Zetas.

El Cártel del Golfo pasó de tener 12 subgrupos del crimen organizado a solo siete organizaciones. Al 2017 se reportó la desaparición de Grupo Lacoste, Grupo Bravo, Grupo Pumas Grupo de Apoyo Ceros o M3, Los Sierra y Los Pantera. Se mantienen como escisiones Metros, Rojos, Grupo Dragones, Los Fresitas, Ciclones, Los Pelones y se reporta la creación de un nuevo grupo denominado Los Talibanes.

Estas dos organizaciones serían las más golpeadas por la actividad oficial.

La información de la PGR distingue que en la actualidad son 37 células criminales (en 2015 eran 45) y se mantienen nueve cárteles en todo el territorio nacional.

“No solo no construyen datos y dan información parcial, construyen una narrativa con muchas incongruencias. A veces dicen que el crimen es omnipotente y otras veces que es cosa de aficionados”, asegura el experto Édgar Morín, autor del libro “La Maña” (2015) al interpretar las cifras de la dependencia.

Para el escritor, uno de los principales problemas para comprender la recomposición de los cárteles de la droga es que hay vacíos y contradicciones que impiden saber cómo se combaten y con base en que se informa de su contracción o ampliación.

El Cártel de Sinaloa (Pacífico) reporta tres células delictivas nuevas: Una denominada Del 28, Los Salazar y Los Memos. La Procuraduría ya no identifica la operación de una célula delincuencial conocida como La Barredora y solo muestra la operación de Gente Nueva, Los Cabrera, Cartel del Poniente, El Aquiles, El Tigre, Los Artistas Asesinos y Los Mexicles.

Los grupos delictivos de los Arellano Félix (3 subgrupos), La Familia Michoacana (2), Carrillo Fuentes o Cártel de Tijuana (2) y los Beltrán Leyva (7) se mantienen igual. En el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) -que no reporta tener subgrupos- solo modificó sus áreas de acción, pues la PGR afirma que ya no opera en la Ciudad de México.

Los Caballeros Templarios en 2015 eran un cártel bastante unido, pues no mostraba escisiones. En tanto que para 2017 ya está dividido en dos células con operación en municipios de Michoacán, una encabezada por Fernando Cruz Mendoza y otra por Homero González Rodríguez “El Gallito”.

Por último, Morín critica que el Estado sea incapaz de, ya no solo enfrentar a la delincuencia organizada, al menos de crear una narrativa medianamente coherente en materia de datos.

En pocas palabras, no solo se trata de acabar a los cárteles, sino que el gobierno tendría que explicar cómo lo hace, por qué lo hace y con qué recursos.