México, D.F.-El inmueble ubicado en Avenida Plaza de la República, con número 140, en la colonia Tabacalera perteneciente a las oficinas del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) fue desalojado definitivamente por encontrarse severamente dañado después del sismo del martes pasado.

Trabajadores de dicho Instituto  denuncian, que desde la tragedia del terremoto de septiembre de 1985, en donde muchas personas perdieron la vida, el edificio se encuentra en terribles condiciones tanto para trabajadores como para personas al servicio del Estado que a diario acudían a dichas oficinas para realizar diversos trámites y sin embargo siguió operando 27 años consecutivos hasta que el dictamen de peritos de Protección Civil fue negativo sobre seguir ocupando el edificio de la misma forma en que ya se venía haciendo.

El 140 de Plaza de la República, que fue construido después de llegar a un acuerdo con la Lotería Nacional dueña del predio en que el ISSSTE se edificó, según señalaron empleados con más de 30 años de servicio ya desde el sismo de 85 presentaba daños en las columnas del sótano donde recibían su paga quincenal, dichas columnas se encontraban ya agrietadas y reparadas con abrazaderas de acero, rellenadas con resina epóxica, esta reparación “temporal” no aguantaría en caso de haber otro sismo de gran magnitud. Hasta hoy las columnas del sótano permanecen así.

Entre otros problemas se encuentra el hecho de que la plataforma que sirve como sostén del edificio de 12 pisos es de tan sólo 70 centímetros de alto, cuando ingenieros indican que en un edificio tan alto al menos ésta base debe ser de 1.50 metros. Hace aproximadamente 5 años fueron agregados a la estructura muros internos de contención que agregaban más peso al edificio, agravando el problema.

El dictamen de desalojo emitido por Protección Civil indica una duración del 22 al 30 de marzo, por el momento. Mientras tanto, a las afueras de las oficinas centrales hay carteles pegados con las direcciones a donde pueden dirigirse los derechohabientes con sus peticiones.