México.- El expresidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva emitió sus primeras declaraciones al público luego de que la Policía Federal allanara sus propiedades y lo llevara detenido para realizarle un interrogatorio, en el marco de una investigación por enriquecimiento ilícito y lavado dinero que involucra a la cúpula de su partido político y a la empresa estatal Petrobras.

El político brasileño indicó haberse sentido “prisionero hoy de mañana”, luego de ser llevado a la fuerza a un aeropuerto de la ciudad de Sao Paulo para declarar.

“Si querían escucharme solo tenían que llamarme que yo iba, porque no debo y no temo”, agregó da Silva en la sede del Partido de los Trabajadores, arropado por cientos de militantes que le daban muestras de apoyo.

Al insistir en que “merecía un poco más de respeto en este país”, el exmandatario declaró que este acto no ha hecho sino “enceder de nuevo la llama”, por lo que “no bajará la cabeza”.

En tanto, el Instituto Lula, ONG que encabeza, emitió un comunicado oficial en el que asegura que “la violencia practicada hoy contra el expresidente Lula y su familia, contra el Instituto Lula, la exdiputada Clara Ant y otros ciudadanos ligados al expresidente es una agresión al Estado de Derecho que afecta a toda la sociedad brasileña”, por lo que consideró la detención como “arbitraria, ilegal e injustificable, además de constituir una grave afrenta a la Corte Suprema”.

Por su parte, la fiscalía que investiga el escándalo de Petrobras, empresa de donde se habrían extraído más de 2 mil millones de dólares, reviró al declarar que “existen evidencias de que el expresidente Lula recibió valores oriundos del esquema Petrobras por medio del envío y reforma de un apartamento tríplex y de una finca en Atibaia, de entrega de muebles de lujo en las dos propiedades y de almacenaje de los bienes por una empresa de transporte”.

La investigación, conocida como “Operación Lava Jato” (autolavado), está considerada como la más grande acción contra la corrupción en Brasil, y ha enviado a prisión a parlamentarios, gobernadores y funcionarios de Petrobras.

Con información de AFP y Efe