Caracas, 28 ago (EFE).- El Centro de Refinación Paraguaná (CRP), uno de los mayores del mundo y en el que la madrugada del sábado se registró una explosión que dejó al menos 41 fallecidos, puede normalizar sus operaciones en dos o tres días, indicaron hoy fuentes de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).

“Ya se alista todo el equipo para iniciar las labores de la normalización operacional del complejo”, dijo a la televisión estatal el vicepresidente de refinería de PDVSA, Asdrúbal Chávez.

“Nosotros estimamos que en dos o tres días vamos a tener restituido (…)”, señaló, por su parte, el gerente general del CRP, Jesús Luongo, después de que hoy se extinguiera el incendio que ardió durante cuatro días en el complejo afectando hasta nueve de sus tanques.

Asdrúbal Chávez apuntó que las tareas de refrescamiento de los tanques seguirán durante toda la noche al tiempo que indicó que es “imposible” que el accidente en Amuay, que tiene una capacidad para refinar alrededor de 645.000 barriles diarios, cause un déficit de combustible para el mercado nacional o para los clientes de PDVSA.

“Tenemos diez días de inventario en el país, lo cual nos permite garantizar el suministro a todas las regiones”, aseguró el directivo de PDVSA al insistir en que, además de las reservas, el resto de refinerías del país procesan 800.000 barriles diarios.

Chávez remarcó que cuando se produjo la parada de la planta, la madrugada del sábado, quedaron suficientes inventarios para “continuar supliendo a diferentes centros de distribución del país y a nuestros clientes internacionales”.

La refinería Amuay, que integra el CRP y es una de las mayores del mundo, explotó la madrugada del sábado por una fuga de gas que se cobró la vida de al menos 41 personas, según autoridades locales, además de destrozos en viviendas y comercios aledaños y decenas de heridos.

Cuatro días después de la explosión, los bomberos consiguieron hoy extinguir el incendio que aún resistía en tres tanques de esa refinería, ubicada en el noroeste de Venezuela.