Una joven de 15 años murió por el ataque de una jauría de perros en Estados Unidos.

La víctima sólo quería alimentarlos, pero todo terminó en una terrible tragedia.

Muere por ataque de una jauría de perros en Estados Unidos

Makayla Fornter, originaria de Arkansas, en Estados Unidos, fue identificada como la víctima que murió tras el ataque de una jauría de perros.

De acuerdo con los reportes, entre 30 y 40 perros desnutridos y en mal estado de salud se abalanzaron sobre la víctima.

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Los animales se encontraban muy cerca de la casa de Makayla, por lo que ella y su mamá, Stephani Wilkie, pretendían darles de comer.

Incluso, Makayla tenía la intención de encontrar un hogar a los perros.

No obstante, la joven fue encontrada muerta en una casa de la localidad de White Oak Drive.

Según declararon vecinos, cuando Makayla intentaba alimentarlos, los perros la atacaron brutalmente.

Los perros, reportan medios locales, estaban acostumbrados a andar libres por el vecindario.

Y ya habían sido reportados por algunos incidentes con los vecinos que informaron sobre el problema a las autoridades.

Indicando que se trataban de perros agresivos, los cuales fueron abandonados por sus dueños cuando decidieron mudarse de la localidad.

De hecho, habitantes de la comunidad relataron que los perros eran muy feroces cuando se estaba cerca la valla de la propiedad.

Por lo que nadie dejaba que sus hijos pasaran cerca de ese lugar que se encontraba junto a la parada del autobús escolar.

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Sacrifican a 14 perros de la jauría que atacó a joven en Estados Unidos

Luego del ataque de una jauría de perros en Estados Unidos, las autoridades decidieron intervenir.

Se reportó que se tuvieron que sacrificar a 14 perros que fueron incautados de la casa donde ocurrió el incidente.

No obstante, los vecinos lamentaron que la medida llegara después de la tragedia en donde Makayla Fornter fue atacada brutalmente.

Además, uno de los habitantes expresó que cuando llamaron al condado de Saline, mandaron un agente.

El problema fue que le aseguraron que no había ningún control de animales en el condado, así que no podían hacer nada con los perros.

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