Brasil.- Dilma Rousseff vuele a tener las horas contadas como presidenta de Brasil luego de que  Wladir Maranhão, presidente del Congreso, decidiera dar marcha atrás con su decisión de suspender el proceso de destitución de la mandataria. 

En un comunicado divulgado esta madrugada Maranhão anunció que revocaba su propia decisión de anular la sesión en el Congreso del pasado 17 de abril, día de la votación en la que la mayoría de los 513 diputados votaron "sí" al impeachment de Roussefff.

La revocación suma a la inestabilidad política de la que Brasil parece no salir y que podría terminar mañana, cuando el Senado vote si respalda la posición de los diputados respecto a la suspensión de Rousseff por al menos 6 meses, periodo en el que se buscará comprobar si la presidenta incurrió en ilegalidades en el balance de la cuenta pública 2014. 

Maranhão sorprendió este lunes al país entero cuando anunció que admitía la solicitud de anulación del proceso, presentada por la Abogacía General de la Unión, dependencia que acusó ilegalidades en la votación del 17 de abril. 

Sin embargo, el anuncio del congresista brasileño no fue admitido por el presidente del Senado Renan Calheiros, quien dijo que de todos modos se procedería a votación del impeachment en la sesión de este miércoles. 

La presidenta Rousseff había festejado la decisión de Maranhão, pero ahora parece prácticamente un hecho que su salida será ratificada mañana en el Senado, pues las proyecciones estiman que la oposición contará con los votos necesarios para hacer efectiva su suspensión temporal. 

Con información de Univisión