30 de abril de 2024 | 05:39 a.m.
Internacional

Critican nombramiento de Mike Pence como encargado de combate al coronavirus

El nuevo “zar” encargado del combate al coronavirus tiene un largo historial de comentarios en contra de la ciencia, señalaron sus detractores.
Compartir en

El nombramiento del vicepresidente Mike Pence como encargado, o “zar” del combate al coronavirus en los Estados Unidos ha atraído fuertes críticas dentro y fuera de redes sociales, por los antecedentes del político y sus posturas francamente en contra de la ciencia.

Pence, practicante de cristianismo evangélico ultraconservador, también estuvo a cargo de una respuesta desastrosa ante la epidemia del virus del VIH cuando fue gobernador del estado de Indiana.

De acuerdo al diario británico The Independent, el vicepresidente no cuenta con experiencia en el área de la medicina. Lo que si tiene son opiniones sobre la ciencia, mismas que han sido formadas más por su fanatismo religioso y conservadurismo, que por el método científico.

En redes sociales, la congresista demócrata Alexandria Ocasio-Cortez criticó el nombramiento señalando que el vicepresidente no cree en la ciencia, lo cual representa un peligro para la gente que podría estar expuesta a la enfermedad.

“Mike Pence literalmente no cree en la ciencia. Es completamente irresponsable el ponerlo a cargo de la respuesta norteamericana al coronavirus mientras que el mundo está al borde una pandemia. Esta decisión podría costarle la vida a las personas. Las decisiones anteriores de Pence (como gobernador) ya lo han hecho”.

Alexandria Ocasio-Cortez, congresista Demócrata

Apenas en el año 2000, Pence escribió un texto en donde negaba los riesgos asociados con el cáncer para los fumadores, tachandolos de “histeria”.

Pence también es un negacionista del calentamiento global, además de expresar dudas de la teoría de la evolución, misma que se opone al creacionismo que enseñan su religión.

Lo que es aún más grave, el vicepresidente se ha pronunciado en contra de otorgar fondos a organizaciones que combaten la propagación del virus del VIH, señalando en su momento que las mismas “celebran y apoyan” comportamientos que facilitan la propagación de la peligrosa enfermedad.

Ante estos antecedentes, el nombramiento de Pence no provoca confianza fuera del círculo de funcionarios y seguidores del presidente Donald Trump.