Brasil.- 31 reos fueron asesinados en la prisión de Roraima, algunos presentaban mutilaciones como extracción de corazón y los intestinos.

Aunque al principio se habló del deceso de 33 internos, la cifra fue corregida a sólo 31 por el secretario de Justicia.

La nueva oleada de homicidios prosigue a la muerte de otros 60 presidiarios durante un amotinamiento, alertando a la población sobre la posibilidad de que la violencia se extienda a las calles.

Las autoridades del estado brasileño de Roraima denunciaron que pese a su petición de ayuda al gobierno federal, en más de una ocasión, nunca recibieron apoyo para enfrentar la crisis carcelaria.

De acuerdo con el secretario de Seguridad del estado, Uziel Castro, la oleada de violencia inició a las 2:30 de la madrugada del viernes y estuvo liderada por integrantes de la pandilla Primer Comando, principal organización criminal en Brasil.

“No hubo confrontación alguna, fueron una serie de asesinatos (…) algunos decapitados, otros con el corazón y los intestinos de fuera”, declaró Castro.

El Primer Comando atacó a otros internos por motivos que no son claros hasta el momento y aunque no se emplearon armas de fuego, ninguno de los mil 500 internos recluidos escapó del acto de barbarie, según calificó.

Con información de AP