Uno de los estatutos más extraños y fascinantes que tiene la física cuántica; es la posibilidad de tener innumerables mundo paralelos con millones de versiones de las personas. Dicha teoría ha sido expuesta por Hugh Everett en su Hipótesis de los Muchos Mundos.

La hipótesis señala que cuando el universo se creó, la capacidad de expansión no se dio a la misma velocidad en todas las regiones, algunas continúan evolucionando, mientras que otras pararon en seco; estas últimas derivaron en "burbujas" de singularidad.

Universos Paralelos

Estas mismas burbujas son lugares donde los conceptos del tiempo y espacio varían de acuerdo a nuestras leyes de la física; esto se explica señalando que el universo se desdobla en una serie de posibilidades cada vez que se lleva a cabo una medida u observación.

Cada evento abre el campo a millones de mundos paralelos

En otras palabras, cada evento que suceda en la Tierra da la posibilidad de desarrollar miles, o millones de mundo paralelos; lo que derivaría en otros "yo", los cuales a su vez, cada que realizaran una acción generarían más desdoblamientos del "yo".

Si bien compartirían ciertos aspectos de su pasado, su presente y futuro son diferentes. Mientras que en un universo eres millonario, en otro podrías ser pobre, haber muerto a temprana edad o ni siquiera existir.

Desdoblamiento de la realidad

Esto también afectaría los eventos a escala macro; pues las personas que los desencadenan tendría un bagaje distinto que afectaría el curso "natural" de las cosas.

Hegel y el problema de los mundos paralelos

Esto implica un problema filosófico en sí mismo; más allá de que se llegue a comprobar o no la realidad de los mundos paralelos y los otros "yo"; en el siglo XIX, el filósofo alemán Georg Wilhelm Friedrich Hegel, estableció que los eventos no pueden ser cambiados.

De acuerdo con su Filosofía de la Historia; el camino histórico es uno y el mismo, no importando las personas. La historia es un ente vivo ineludible, donde los eventos seguirán su curso a pesar de los obstáculos que el ser humano ponga en medio.

Realidad paralela

En otras palabras, la resolución de los actos siempre será igual; lo cual no invalida del todo la existencia de otras versiones de "uno", pero sí el que estas fueran sustancialmente diferentes a la original, pues su pasado, presente y futuro es uno y el mismo.