Capcom dio a conocer el cierre total de su estudio "Capcom Vancouver", responsable de la saga Dead Rising y la nueva versión de Puzzle Fighter. De acuerdo con un comunicado liberado por la propia desarrolladora al medio Kotaku, la decisión se tomó después de hacer una revisión de los juegos en los que se trabajaba.
Lo anterior significa que la gran mayoría de esos mismos títulos han sido cancelados de manera indefinida. Todo indica que la empresa japonesa ya tenía planeado darle fin a su división en Canadá, pues a inicios de 2018 se llevó a cabo una reestructuración donde se despidieron a varios miembros del equipo de desarrollo.
Ahora, con la confirmación se tiene el dato de que 158 personas se quedarán sin empleo de manera inmediata; dejando sólo una base operativa, la cual se mantendrá hasta inicios de 2019, cuando será la liquidación total del estudio.
El gran problema de Capcom Vancouver, desde su creación en 2005, fue que nunca pudieron dar una serie redituable como tal; si bien Dead Rising se convirtió en un título de culto para gran parte de los videojugadores, las ventas nunca llegaron a ser las esperadas. Lo mismo para la nueva versión de Puzzle Fighter, que no agradó desde que se presentó el cambio en el diseño de personajes y estética.
Con información de Kotaku.