Todo político necesita de un asesor de imagen; y Hillary Clinton, tiene a una de las mejores del mundo: la editora en jefe de la revista Vogue americana, Anna Wintour.
Conocida también como “La Dama de Hierro de la Moda”, Wintour se ha encargado de supervisar minuciosamente cada paso de la candidata del Partido Demócrata. En caso de que Clinton gane las elecciones, se convertiría en la primera mujer en toda la historia del país en alzarse como la máxima responsable del Gobierno en un momento decisivo en el que el magnate y empresario republicano Donald Trump es su principal opositor para optar a la Casa Blanca.
Además de apoyar fervientemente a la esposa del ex presidente Bill Clinton en su campaña y ayudar a recaudar fondos para la misma, Wintour ha pensado estratégicamente en el vestuario de la candidata.
Hay que aceptar que ese dueto ha tenido muchos aciertos; sin embargo, es importante reconocer aquella vez donde Clinton lució un polémico saco Giorgio Armani mientras emitía un discurso sobre la desigualdad de ingresos económicos…
Eso sí, lo poco que se sabe de Hillary y su estrategia de moda; es que no acepta prendas “prestadas” de las marcas de lujo; sino que ella misma lo compra. De hecho, Trump decidió seguir este consejo; ya que hasta hace unos días, lucía los trajes Brioni que le eran prestados o regalados por la firma italiana y ahora, ya los paga.
También que parte del asesoramiento de Wintour se centra en que utilice prendas de creadores norteamericanos, especialmente trajes de formales de colores vivos.
Con información de El País.