La historiad del pescador Jawdat Abu Ghurab de 29 años ha dado la vuelta al mundo y ha estremecido al mundo del arte… Ghurab solía trabajar como albañil, pero cuando Israel restringió la entrega de materiales de construcción en la Franja de Gaza en el 2007, decidió seguir el oficio de su padre y se convirtió en pescador.
Todos los días se adentraba en el mar por horas, pero uno de los días de agosto encontró algo muy pesado, un “pez gordo” de esos que le dejarían mucho dinero: un Apolo de bronce de unos 2.500 años de antigüedad.
Evidentemente Ghurab no tenía idea de lo que había encontrado…
"Me quedé solo en el mar con mi pequeño bote y los remos. Esperé durante horas, Nunca me imaginé lo que el destino tenía preparado para mí en las profundidades del mar... A veces las olas mueven el fondo del mar y los peces pequeños van allí en busca de comida. Vi cómo los peces se congregaban en un área no muy lejos de la costa, a unos 100 metros, así que remé hacia allá… Vi el cuerpo de una persona sumergida en el mar y medio enterrada bajo la arena, así que decidí sacarlo.”, comentó.
Al principio Ghurab estaba asustado. Clavó la mirada en el agua, pero no reconoció el rostro del hombre. Se tiró al agua, buceó y tocó el cuerpo, pero se sentía como piedra. Literalmente el joven pescador se encontró a un dios: Apolo, el dios de la poesía y el amor según las creencias griegas.
"Traté de moverlo, para asegurarme de que se trataba de una estatua, pero era demasiado pesada, era de color dorado, así que pensé que era de oro", continuó declarando.
Ghurab marcó el lugar y se dirigió de nuevo a la playa en busca de sus parientes, quienes le ayudaron a desenterrar la pieza que se encontraba a unos cuatro metros de profundidad.
"Pudimos deslizarlo bajo el agua por uno o dos metros, pero tuvimos que volver a subir, para respirar y entonces volver a intentarlo", relata.
Después de cuatro horas lograron sacar el objeto del agua. Era la estatua de un hombre desnudo. Lo pusieron en un auto y lo llevaron a la casa de Ghurab.



"Mi mujer se tapó la cara cuando lo vio desnudo en la casa. Ella me rogó que lo cubriera", recuerda riendo.
El tío de Ghurab, Atef, propuso cortar la estatua en trozos pequeños y venderlo.
"Al ver el color amarillo de la cabeza de la estatua que pensé que era de oro, pero uno de mis hijos sugirió cortar el dedo y llevarlo al mercado para estar seguros, recordamos que uno de nuestros parientes trabajaba en el barrio de la venta de oro. Lo llamamos y él examinó la estatua y nos dijo que estaba hecho de bronce y que incluso podría ser más valiosa aun sin ser de oro". Comentó el tío.
Ghurab consideró contrabandear la estatua a Egipto para venderla, pero los túneles de los contrabandistas -cavados para eludir las restricciones aplicadas por Israel y Egipto después de que el movimiento islamista Hamas tomó el poder en Gaza- quedaron obsoletos luego de que el ejército egipcio las cerrara el verano pasado.
Lamentablemente la pieza fue robada al momento de que el pescador intentó contrabandear la escultura. Los vecinos empezaron a hacer preguntas, así que Ghurab le pidió a un familiar comandante de las brigadas Izz al Din al Qassam Brigades, del ala militar de Hamas, que le ayudara a ocultarla.
"Las personas que se llevaron la estatua dijeron que me enviarían una buena recompensa después de que lo vendieran, pero no hemos conseguido nada todavía", dice.
Se sabe que la estatua estuvo a la venta en eBay, con un precio inicial de US$500.000. Pero luego la oferta desapareció.
Ahmed Elburch, un funcionario del Ministerio de Turismo y Antigüedades de Gaza dijo que vio por última vez la estatua en octubre. El hombre estaba preocupado por su condición, ya que el color parecía estar cambiando y le habían cortado uno de los ojos.
Por otro lado, el museo francés Louvre ya hizo llegar una petición formal de préstamo al gobierno de Gaza para evaluar el Apolo. El préstamo de la estatua de 1,75 m está siendo evaluada. Sin embargo, la policía de Hamas rechazó la petición para verlo…
Lo único cierto es que el paradero del Apolo, perdido por siglos bajo las costas orientales del Mediterráneo, ha vuelto a ser todo un misterio.
Con información de BBCNews.