Cuando estamos enamorados y decidimos entrar en una relación, muchas veces tenemos que adaptarnos a la otra persona, lo que nos lleva a hacer cambios tanto en nuestros hábitos como en la forma de negociar las cosas.

Dicen que el estar enamorado te cambia la visión de todo. La vida se vuelve color rosa y hasta el pesar de levantarse temprano desaparece, incluso te apuras en el trabajo para salir a una hora considerable y poder ver a la otra persona más tiempo.

¿Te has puesto a pensar qué cambios has hecho al estar con tu pareja? Muchas veces pasamos las cosas por alto, cosas que incluso llegábamos a criticar en otras parejas. A continuación enlistamos 10 cambios notables que todo enamorado hace:

1. Nuestro vocabulario

Este punto es más evidente en los hombres. De hablar de una forma que sólo podríamos escribir así “$%&/@” pasan a deformar el español en frases como: “te extraño mucho, mi shielooo, cosita, amorshito”, y toda clase de cursilerías escritas mal intencionalmente, porque se “ven más lindas”.

2. Sacamos nuestro lado poeta

El estar enamorado inspira cosas que ni tú sabías que podías escribir. Es un reto plasmar en letras algo intangible como el amor. En cierta forma podríamos decir que el enamorarte logra sacar a ese escritor reprimido y dedicarle algunas letras a tu pareja.

3. Inventamos apodos cursis

Ya tocamos este tema en una nota anterior. TODOS hemos pasado por esto; desde el tradicional “amor” hasta el “terroncito de azúcar” empalagoso.

4. Sacamos el decorador que llevamos dentro

Cualquier detallito que le demuestre nuestro amor es bueno. Llenamos la casa con post-its, pedimos pizza con el peperoni acomodado en forma de corazón, llenamos los cuartos de flores y globos. En fin, nuestras habilidades de decoradores encuentran un espacio para expresarse.

5. Te interesas por cosas que antes ni al caso y aprendes más de ellas

Ninguna persona es igual a otra. En las parejas cada quien tiene gustos diferentes, pero esa diferencia es la que nos lleva a querer saber más e involucrarnos en lo que le encanta. Si nuestro amorcito es amante de la crianza de perros crestados chinos, casualmente somos la otra única persona en el universo a quien le importa eso. Si es fan del cine experimental, ¡qué coincidencia! nosotros somos fans de esas películas que casi nadie conoce. Con sólo saber que a la otra persona le gusta algo, ese tema pasa de la indiferencia la repentina sabiduría en nuestras cabezas.

6. Nos ponemos a hacer ejercicio

Y a dieta si es necesario... ¡Hay que verse bien para uno mismo, pero sobre todo para el otro! En la etapa de la conquista, queremos vernos perfectos todo el tiempo.

7. Cambias tu status en Facebook, incluso cuando decías que no lo ibas a hacer.

De “soltero” a “en una relación” hay un click de distancia y un mar de sentimientos. Si a todo esto le sumas que cada estado que publicamos se torna más amoroso y cursi, obviamente etiquetando siempre a la persona, hacemos más notorio nuestro estado. Ahhh… además de cambiar mil veces nuestra foto de perfil y de portada.

8. Nuestros gustos musicales cambian.

Si eran fan de Pink, Katy Perry o Adele, ahora tus gustos son totalmente distintos. Metallica y AD/ DC te parecen de pronto los mejores grupos que escuchaste nunca (y en verdad lo son) porque son los favoritos de tu pareja.

9. Desaparecemos del planeta.

Si los fines de semana solías salir con tus cuates, ahora ya casi no los pelas, cuando menos nos damos cuenta, ya estamos más que borrados del mapa y nos mudamos al espacio exterior con nuestra pareja.  ¿Cierto?

10. Cuando estamos con otros, el único tema del que hablamos es: nuestro amorcito y la hermosa relación que tenemos.

Puede que esto les caiga un poco mal a nuestros conocidos… Pero no nos importa, lo importante es hacerle saber al mundo lo felices que somos.

Con información de Peru.com