¡Atención! Lo que vamos a decir ahora podría parecer falso, pero no lo es. Es sólo el resultado de comprar los famosos productos milagro sin conocer qué es exactamente lo que contienen y esconden detrás de nombres engañosos y etiquetas fraudulentas.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) emitió una alerta para advertir a la gente sobre el riesgo que implica consumir ciertas soluciones minerales “milagrosas” que han comenzado a comercializarse con gran éxito durante los últimos años, sobre todo en Internet.

Se trata de productos que se venden bajo el concepto de “solución mineral maestra”, “suplemento mineral milagroso (MMS)”, protocolo de dióxido de cloro” o “solución de purificación de agua (WPS)”; como podrás notar, desde el nombre ofrecen milagros, pero también contienen la palabra CLORO.
Es verdad que este elemento químico que suele utilizarse para desinfectar agua o alimentos, pero en tal caso, los productos están hechos especialmente para eso y la concentración es muy baja. Sin embargo, los puntos anteriores no están regulados en los productos milagro que se venden en la red.
La FDA advierte que estos productos son peligrosos pues al estar hechos a base de clorito de sodio, no son aptos para el consumo humano, sobre todo porque cuando se le agrega el llamado “activador” que es un ácido, la mezcla se convierte en dióxido de cloro que utilizado de forma irresponsable puede ser tóxico.
Según enunció la entidad, hay distribuidores de estos productos que afirman que al mezclar estos elementos con ácido cítrico, se convierte un un consumible líquido con propiedades antimicrobianas, antivirales y antibacteriales. Además prometen que son auxiliares (o remedios) en el tratamiento de autismo, cáncer, hepatitis, gripe y VIH.
A pesar de que se ha advertido a la población sobre los riesgos, estos productos siguen causando problemas de salud en un gran número de personas que, tras consumirlos, llegan a las salas de emergencia con vómito, diarrea severa, hipotensión potencialmente mortal y fallos hepáticos fulminantes.
Estos químicos disfrazados de sustancias milagrosas aún se venden en diversos países, incluido México en donde puede encontrarse como MMS.