Seguramente recordarás la historia de Lauren Wasser, una modelo que en el 2012 sufrió shock tóxico (SST) tras usar un tampón y que derivado a esta reacción, perdió la pierna y pese a todo pronóstico, siguió modelando y convirtió su lucha en un ejemplo de vida.

Ahora, 5 años después, médicos aseguran que las secuelas no son positivas y que probablemente tengan que amputar la otra pierna debido a complicaciones duraderas.

Wasser de 29 años, comenzó a tener síntomas similares a los de la gripe que culminaron en un ataque al corazón. La gangrena comenzó a consumir ambas piernas, lo que provocó una amputación debajo de la rodilla de su pierna derecha y amputaciones de dedos en su pie izquierdo.

Aunque sus médicos le recomendaron amputarle ambas piernas en ese momento, ya que las posibilidades de salvar su pierna izquierda no eran buenas, Wasser decidió luchar y salvar su pierna izquierda.

Desde que sobrevivió a la odisea desgarradora, Wasser ha dedicado su vida a concientizar sobre la prevención de SST, incluidos los riesgos potenciales del uso de tampones.

En cuanto a sus continuas batallas con los efectos de TSS, Wasser lucha con un dolor insoportable causado por la pierna izquierda que luchó por salvar.

"Tengo una pierna dorada de la que estoy completamente orgullosa, la pierna izquierda por la que lucho para salvar, tiene una úlcera abierta, sin talón y sin dedos, y a lo largo de los años, mi cuerpo ha producido mucho calcio, lo que hace que mis huesos crezcan en ese pie", reveló la también actriz durante una entrevista.

Esta lucha constante entre el cuerpo y el cerebro de Wasser significa que la modelo ha tenido que someterse a nuevas cirugías para reducir su hueso. Sin embargo, no es una solución permanente.

A pesar de que todo suena desalentador, Wasser está agradecida de estar viva y quiere que otras mujeres sean conscientes del peligro que representa el uso de tampones.